Julio Sanz Saiz es un relevante
pintor, escritor y poeta cántabro nacido en
Ganzo. Es un amante de su trabajo y de su tierra,
Cantabria, además de su familia. No siempre
se dedicó plenamente al arte, sino que lo compaginó
con su trabajo en la mina de Reocín, hasta
su jubilación, momento en el que pudo centrarse
completamente en la escritura y la pintura.
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Pablo, Julio
Sanz Saiz y Borja. |
Como dice Miguel Ibáñez,
"cuenta ya con ochenta primaveras. Y sigue con
el mismo ánimo, la misma ilusión y vitalidad
de siempre, con nuevos proyectos para sus pinceles
y su pluma, para extender los colores y escribir los
versos que tanto conocemos y tantos nos gustan”.
Es fácil ver su animosa silueta por las calles
de Torrelavega, su figura incólume en presentaciones
y exposiciones, y su ánimo presto para, en
cualquier momento, escuchar de su amabilidad y su
inteligencia cómo han sido o serán los
dibujos y acuarelas que ha pintado, las fotografías
que atrapan sus viajes, los poemas que siente, o las
palabras que le bullen.
Ha sido y es uno de los símbolos de eso que
llamamos el mundo de la cultura, y que no es más
que nuestra alma colectiva y desnuda.
Es recordado por todos, y en esta entrevista en su
casa lo hemos podido comprobar, por su amabilidad,
su ingenio, su sagacidad y su humor. Y da igual que
la conversación tercie de fútbol, de
abusos medio ambientales, de arte o del surrealismo
social que non inunda. Al final, un hilo de humor
hace todo inteligible y llevadero. Y todo pese a las
pruebas a que la vida le ha obligado a superar, en
las carnes de su propia sangre. Como recordaba Miguel
Ibáñez, una alegría y un destino,
vivamente presente en su obra poética:
"Después de confesaros
que aún conservo la alegría
y que aún sé pararme en medio del
camino
para perder el tiempo contemplando una nube,
para mirar a un niño jugando con el viento,
para envidiar a un perro porque ignora la prisa".
"Lo escribo
porque quiero repartir mi cosecha
de hermosas soledades en granadas espigas
y librarme del odio, del rencor y la envidia
para poder tumbarme a soñar bajo el cielo
sin lastres dolorosos en mis alas cansadas,
sin torpes adherencias en mis manos abiertas"
Fragmento de 'Testamento'
Sus obras literarias más conocidas son 'Ríos
en Cantabria', 'Tudanca y el Nansa', 'El Real Valle
de Reocín' y 'El Valle de Torrelavega', 'Caminos',
'Los árboles', 'Sonetos de la ciudad', 'Sonetos
del amor ausente', 'Poema a Cantabria', 'Epístolas
y Elegías', 'Cantos deportivos', 'Ángeles
rotos', 'Cancionero de Cantabria', además de
sus grandes obras pictóricas y sus incursiones
en múltiples disciplinas
Pregunta.-
¿Dónde
y cuándo naciste?
Respuesta.-
Nací en Ganzo el 10 de
enero de 1928.
P.-
¿Desde cuándo
te interesó la poesía, escribir libros
y la pintura? ¿Y cómo te aficionaste
a ello?
R.- Desde cuándo lo puedo
decir y cómo me aficioné a ello no lo
sé, tal vez porque tuve la suerte de tener
un maestro que me inculcó esa afición
y leí muchos libros que él me dejó.
Y desde niño fue cuando me aficioné
a ello. Recuerdo los versos que no puedo repetir porque
se me caería la cara de vergüenza que
escribí a una pobre señora de mi pueblo
y hoy en día me arrepiento de verdad.
P.-
¿Dónde
y cuándo estudiaste?
R.-Los primeros estudios en la escuela
nacional de mi pueblo hasta los 14 años y a
continuación fui a Madrid a casa de un familiar
y estudié con los jesuitas ocho años.
P.-
¿Te has inspirado
en alguien a la hora de hacer tu trabajo? ¿Tuviste
a alguien que te haya ayudado en tu carrera y en tu
vida?
R.-Influencias tuve, como es lógico,
de muchos autores, de todos los que yo leí.
La influencia es inevitable y muy buena, lo que ya
no es bueno es copiar de aquellos que te influyen,
pero para todo hace falta un aliciente y ese aliciente
es la lectura de poetas ilustres que si tu llevas
algo también de la poesía dentro, pues
saldrá. Y si no, también saldrá.
Pero respondiendo a tu pregunta, pues claro que todos
los poetas a los que he leído han influido
en mí de una manera u otra.
P.-
¿Qué
es lo mejor y lo peor de tu trabajo?
R.-Mira, si hay algo que no me atrevería
yo a decir es hablar de mi mismo, y mucho menos elogiándome,
y lógicamente tampoco lo haría tirándome
por tierra. Por tanto que sean los demás los
que digan si he hecho algo bueno, que yo creo que
algo bueno habré hecho. Aunque no te lo propongas
hacer cosas buenas por casualidad las haces ¿no?
Y si te las propones pues mejor, más fácil,
pero sé de una cosa que he hecho mal y es perder
demasiado tiempo.
P.-
¿Cuál
es la obra literaria que más te ha llenado
y con la que te has quedado más satisfecho?
R.-Está pregunta sí
que es difícil, es como si me preguntas que
cuál de mis nueve hijos me agrada más,
porque son hijos, hijos intelectuales, pero son hijos,
un libro es un hijo. Estoy muy satisfecho con 'Ríos
de Cantabria' luego también con poemas aislados
como puede ser 'Testamento'. Luego tengo una serie
de sonetos, 'Sonetos del amor ausente' que aunque
están llenos de tristeza los considero bastante
logrados. Y otro 'Sonetos de la Ciudad', un tema bastante
más difícil pero creo que también
me satisfacen, pero no se cuál es el valor
real, eso que lo digan los demás y como los
demás a mi no me lo dicen si son amigos me
dicen que son buenos y con los enemigos no me hablo...
P.-
¿Porque elegiste
la acuarela en vez del óleo para tus pinturas?
R.-Mira, exactamente no lo sé,
pero creo que es por la dificultad que encierran,
las cosas fáciles no me gusto nunca hacerlas,
esto parece masoquismo ¿no?, complicarte la
vida con lo difícil, tal vez lo sea, pero pintar
una acuarela la técnica no es nada fácil;
el arte no tiene nada que ver con la técnica,
se puede hacer arte con un carboncillo y se puede
no hacer arte con los mejores pinceles y los mejores
colores del mundo. El arte no está en el sistema
que tú emplees para pintar, la materia; el
arte está en si lo sabes poner, y te respondo
lo mismo que con la poesía, que no lo sé.
Yo sé que disfruto mucho pintando acuarelas
porque la acuarela no acepta arrepentimientos, das
una pincelada y es muy difícil que si te has
equivocado puedas borrar, muy muy difícil.
Y si lo borras va a quedar huella en el papel y lo
que pongas encima se va a notar. Entonces esa dificultad
creo yo que es la que me indujo a seguir con la acuarela,
aunque también pinto óleo y hago retratos
a pastel, pero lo mío es la acuarela.
P.-
De la pintura, la prosa
o la poesía ¿con cuál te quedas
o amas a las tres por igual?
R.-Bueno, pues como se suele decir
muy buena pregunta, me alegro de que me la hagas.
La pintura, la prosa o en verso son tres caminos,
a mi modo de ver, convergentes en un punto, y ese
punto es el entusiasmo por la literatura y por las
cosa que la rodean, en transmitir a los demás
lo que sientes cualquiera de los tres caminos llevan
al mismo sitio, según yo lo veo.
P.-
¿Qué
opinas de la poesía, la pintura y los escritores
en prosa de Cantabria actualmente?
R.-Creo que hay un plantel de poetas
y pintores muy buenos y si no te digo nombres es porque
sabes lo delicado que es ponerte a decir nombres,
que digas el nombre y que te olvides de aquel o de
aquellos que lo merecían. Pero los hay muy
buenos. Lo que no quiero tampoco es despertar sus
subjetividades.
P.-
Una anécdota
de tu vida.
R.-Una anécdota... así
de sopetón es muy difícil, pero te voy
a contar una de mucha gracia:
Estoy un día en mi estudio, que está
en la planta baja del Barrio Covadonga, y lloviznaba.
Llaman a la puerta y les digo "adelante, pase"
y sale un señor que pone un pie en el escalón
y me dice que nada más que venía a saludarme.
Le dije "¡hombre! muchas gracias!".
Y me dijo: "¿qué, trabajando?"
Y le dije que sí, que aquí estaba pintando
un poco, "no sirvo para otra cosa". Y dijo
él: "ya, algo hay que hacer ¿verdad?".
P.-
¿Qué
nos recomiendas o que consejos útiles nos puedes
dar con respecto a tus aficiones?
R.-El consejo que se da para cualquier
actividad es que sea positiva y noble como escribir,
o cualquier otra, es constancia, mucha voluntad y
no desfallecer por nada, que los errores sirvan para
aprender, para decepcionarte. Cuando eres joven es
una oportunidad única, no habrá otra
oportunidad de prepararte para la mayoría de
edad y la vejez, que eso hay que tenerlo claro, que
la juventud esta para prepararnos. Hay que divertirse,
por supuesto, pero aquello que te gusta hay que hacerlo
con tesón y con voluntad. Deciros "llegaré,
lo haré con trabajo y sacrificio", porque
a la larga tendrás la recompensa.
P.-
¿Sigues trabajando
fuertemente o la vida te va aflojando esas ilusiones?
R.-Fíjate que te digo que
cada día lamento más tener ochenta años,
porque cada día tengo más ilusiones,
más proyectos. Es curioso, parece una contradicción
sobre todo si nos lo han hecho creer así, que
en la vejez va muriendo todo, que ya se pierde el
entusiasmo. Pues eso no es cierto lo perderá
el que lo pierda, en mi caso, y los que me conocen
lo saben, cada día tengo mas ilusiones. La
vejez no tiene por que ser un estado de desidia, de
abandono, ni mucho menos, Si te quedan muy pocos años
de vida, mayor motivo para hacer más cosas.
P.-
¿Hay algo que
no hayas podido hacer y te hubiese gustado hacerlo?
R.-Pues sí, muchas cosas.
Una hubiera sido haber hecho Filosofía y Letras
y la otra haber ido a Bellas Artes. Yo no sé
si entonces hubiera sido mejor pintor y mejor, pero
la realidad es que siempre era un sueño, pero
eran años donde no se podía uno andar
con muchos romanticismos. Eran años de ganarte
la vida muy duramente, había mucha hambre después
de la guerra y yo tuve que hacer unos estudios "prácticos",
porque lo otro "son puñeterías".
P.-
¿Te sobra o
te falta tiempo para hacer todo lo que te gusta?
R.-Me sobra. Todavía si quisiera,
de las veinticuatro horas que tiene el día,
un par de ellas tendría para aburrirme, pero
no me aburro aunque quisiera. El día tiene
veinticuatro horas dividido entre tres: ocho durmiendo,
que ya está bien, yo duermo seis; ocho trabajando,
que ya está bien también y la otras
ocho ... perdemos mucho tiempo, lamento haber perdido
mucho tiempo y por eso quizá mi actividad ahora
es casi frenética, porque intento recuperar
el tiempo que perdí.
P.-
¿Qué
es para ti Cantabria?
R.- Yo soy hijo de vallisoletano
y cántabra. Donde he nacido es donde están
mis raíces, donde aprendí a la vida,
a vivir, a trabajar, a todo. Pero Cantabria hay que
mirarla de otra manera, no como lo que es o lo que
ha sido para mi. ¿Qué es Cantabria?
Bueno pues es una de las regiones más bellas
de España, tiene una riqueza patrimonial extraordinaria,
un paisaje que ya, ya, y las gentes pues como en todas
partes, no vamos a caer en decir que somos los mejores,
ni que somos los peores, seremos como en todas las
partes, pero yo estoy muy contento de ser cántabro.
Pero, claro está, que si hubiera sido castellano,
por ejemplo, pues también estaría muy
contento de serlo. En realidad lo que somos, es españoles,
yo soy un español que nació en Cantabria.
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Julio Sanz
Sainz responde a las preguntas. |
P.-
¿Qué
nos recomendarías a los jóvenes para
valorar con cariño a nuestra comunidad y a
su cultura?
R.-Viajar, conocer la provincia.
Es curioso que de la provincia hablan mucho las gentes
que yo conozco y realmente no la conocen. De una manera
un poco sibilina les estoy examinando de Cantabria,
y no saben dónde están lugares maravillosos.
Le preguntaba yo a alguno ¿sabes dónde
están Las Enestrosas? Y no saben que es una
zona, una comarca. Tampoco conocen dónde están
los Carabeos, ni la aldea de Ebro, ni cuántas
ermitas románicas hay, ni cuántas ermitas
rupestres. Si no conocemos nuestra tierra es imposible
amarla, porque no se ama lo que no se conoce, es muy
difícil. Y si no lo amas tampoco lo respetas,
el conocimiento te lleva al amor y el amor al respeto.
Yo me jacto de que conozco Cantabria aldea por aldea;
habrá muy pocos caminos, que serán más
bien sendas, que yo no conozca.
P.-
¿Por qué
te fuiste a vivir a Barcenaciones y no a Ganzo, tu
pueblo natal?
R.- Pues porque la vida no es lo
que tú quieres, se va desarrollando a veces
conforme a circunstancias inesperadas totalmente y
esta fue una. Un compañero de trabajo, que
ha fallecido hace poco el pobre, me vendió
esta finca. El precio era muy asequible para mis medios
y la compré, pensando que teníamos que
hacer una casa, pues entonces éramos nueve
hijos y nosotros dos once. Vivíamos en una
casa muy pequeña y esa fue la razón.
Si en vez de ofrecerme la finca aquí me la
ofrecen en otro sitio pues también hubiera
dicho que sí. Yo nací en Ganzo, pero
pude haber nacido en Polanco, entonces eso no es determinante
para mi. Y si a mi Ganzo me atrae es porque allí
están mis recuerdos infantiles.
P.-
¿Por qué
pusiste a tu casa cántabra el nombre de 'El
Remolino'?
R.-No, es muy poético y...
casi todos los amigos creen que lo puse yo, pues no
en todos los planos del catastro esta zona se llamaba
el remolino. A mi siempre me ha interesado el intentar
descubrir por que este lugar se llama así.
Por ejemplo, en todos los pueblos que empiezan por
so, como Sopeña o Socueva quiere decir bajo
la peña o bajo la cueva. O que Campoo de Suso
es de Campoo de arriba y Campoo de Yuso es Campoo
de abajo. Pues eso es corriente. Ya no es tan corriente
el saber por qué se llama Bargas. Una barga
es una pendiente del terreno larga y siempre me intrigó
por qué llamaban a esto el Remolino. Un día
estando en el pueblo que había tormenta y cellisca,
me dije tenía que ser por esto y aquí
este valle propicia encuentros de diferentes corrientes
de viento y cuando hay llovizna como aquella intensa
vi un remolino tremendo y pensé que esta era
la razón. En los pueblos que son muy sabios
poniendo nombres a las cosas, son nombres que obedecen
a una circunstancia, a algo, no son nombres así
por que si, y la zona de allí arriba se llama
Ribarredonda, lógico lo ves desde mas alto
y ves que es una colina perfectamente redondeada;
o el Gurugú, nombre que se repite en España
en muchos lugares y nadie me dice el porqué.
P.-
¿Tuviste alguna
influencia de algún pintor poeta o escritor?
R.- Sí, influencia de todos
los buenos, o más que influencia yo lo llamaría
aprendizaje. Aprender estamos aprendiendo siempre.
Cuando hay una exposición voy a verla, sea
el autor de renombre o principiante, me da lo mismo,
porque en todas sabes ver y quieres ver con una postura
humilde y de todos aprenderás algo. Si no eres
humilde, no aprenderás nunca nada, porque si
acudes allí con la idea de que tú sólo
puedes enseñar al otro, estás apañado,
¿no? pues influencias de todos los que están
en el Museo del Prado, en el Museo Moderno Contemporáneo
en Madrid y museos que he visitado de Francia, Italia,
en Grecia, en Inglaterra, de todos aprendo, de todos....
P.-
¿Perteneces
a alguna escuela pictórica, poética
o literaria?
R.-No, no intencionadamente. A veces,
precisamente por la pregunta anterior, por la influencia
con otros, la semejanza se va formando una escuela
sin darte cuenta; pero vamos, no soy consciente de
que pertenezca.
P.-
¿Cuál
es y cómo fueron tus comienzos?
R.- En el colegio. Tengo los cuadernos
de entonces que me regaló mi maestro después
de cuarenta años. Los cuadernos eran del maestro
y todos los días mandaba a los más adelantados
de la clase hacer un trabajo, que había que
ilustrar. Y tengo dibujos muy curiosos de esa época
de cuando tenía muy pocos años. Además
el maestro me daba libros de poesía. Recuerdo
'Las mil mejores poesías', del que me aprendí
poemas que hoy en día te puedo recitar sin
ningún titubeo. Después me dejó
obras de teatro de Lope de Vega, de Calderón.
De 'La vida es sueño' me aprendí el
papel de todos los personajes; 'El Tenorio' también,
'La Venganza de don Mendo', 'El Alcalde de Zalamea'
me la sabía también. He tenido y tengo
el privilegio de tener muy buena memoria, pero la
memoria como los músculos hay que hacerlos,
hay que ejercitarlos.
P.-
¿Crees que la
enseñanza del arte es correcta?
R.- No me atrevo a opinar sobre eso,
pues no sé cómo está la enseñanza
o el arte, hay que estar muy metido en ello, pero
me imagino que sí es correcta pues todas las
cuestiones didácticas han progresado mucho.
Lo que hoy en día es un colegio no es lo que
era cuando yo fui, no se parecen en nada. Lo creo
por sentido común no porque lo conozca.
P.-
¿En
qué situación crees que esta hoy en
día el arte en Cantabria?
R.- Magnífica, pues como te
decía anteriormente hay muy buenos pintores,
muy buenos poetas y eso quiere decir que está
en una situación estupenda. Además el
número de gente que se ha metido en el arte,
valga la expresión, es mucho mayor, porque
hay más facilidades que nunca, ahí esta
la Fundación Botín. Además, las
familias tienen mejores medios económicos y
pueden mandar a estudiar, cosa que antes era muy difícil.
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