La poesía es una forma de expresión cercana a la adolescencia. Sentimientos convertidos en verso enviados por dos alumnos del colegio San Agustín.

Jaime Valcárcel, con su tutor y algunos compañeros.

                                             El mar en calma,
                                              la noche triste,
                                               el árbol canta,
                                              el viento embiste.

Marinero alza la vela
y alza también tu bandera.
Marinero ante el timón
te guía tu corazón.

Esta hoja es mi jardín,
esta teja es mi tejado,
y esta gota de agua
es un río desbordado.

Levanté temprano,
el sol aún dormía,
contemplé la luna
que bien relucía,
observé el horizonte,
en él se escondía,
esperando su turno,
un fabuloso día.

Lanza en mano,
escudo en otra
fiel caballo en el que montas,
un buen yelmo y armadura
que se adapte a tu estatura,
una meta que alcanzar
para por algo luchar.

Arco para el arquero,
caballo para un caballero,
lanza para el que bien lanza
y escudo para todos ellos.

Así preparan la guerra
guerreros y no guerreros
que ruegan a Dios orando
que les acoja en el cielo.

                                                                Jaime Valcárcel Cobo (2º ESO)

LA ESCUELA

¿Qué es la escuela?
¿Acaso es un lugar de llantos,
como un entierro,
o un lugar de risas,
como una fiesta?,
¿un lugar de emociones y sentimientos
o tal vez un rincón,
donde poder crear amigos?

¿La escuela?
Es aquello que se siente,
que se da y se recibe,
un don que te hace feliz,
un abrazo que te acompaña
durante un largo periodo de la vida,
donde cada día aprender cosas nuevas
entre pupitres y tizas,
entre amargas tristezas y
gratas sonrisas.

"Mi significado de escuela":
escuela eres el castillo famoso
para quien quiere ser
príncipe o princesa
de los números o de las letras.

El rey o la reina es
el profesor o profesora,
que alivia el miedo del alumno
y le regala seguridad
para entender la asignatura.

Un corazón andante para
quererte solamente está latiendo
y para querer un poco no es necesario
decirlo, sino sentirlo.

Sin luchas, sin penas, sin esfuerzo,
sin alegrías, sin ganas,
no se encuentra el camino
del perfeccionismo, no hay vida,
y ellos son parte de la mía.

                                                            Paula Miméndez Vilarchao (2º ESO)