Entrevistamos al doctor Juan Martino, el neurocirujano más joven del Servicio de Neurocirugía del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla. Tres realizar sus estudios en la Facultad de Medicina de la Universidad de Cantabria, Martino hizo la especialidad en el Hospital de Bellvitge y continuó su formación en Estados Unidos y Francia.

Juan Martino, a la izquierda, junto a Pablo.

Pregunta.- Hola, Juan. En primer lugar gracias por concedernos parte de su tiempo para realizar esta entrevista. Empecemos por el principio, ¿en qué colegio estudió?
Respuesta.- Estudié Primaria en el colegio Tagore y luego pasé al instituto Villajunco.

P.- ¿Era un buen estudiante?
R.- Durante el colegio y el instituto fui un estudiante normal, no muy bueno. Cuando comencé a estudiar más fue una vez que entré en la universidad.

P.- ¿Dónde estudió la carrera?
R.- En la Facultad de Medicina de la Universidad de Cantabria.

P.- ¿Con qué nota media entró en la Facultad?
R.- Entré con una nota de 7,50.

P.- ¿Dónde y cuándo nació su interés por la medicina?
R.- Siempre me gustaron mucho la biología y la genética, y en el instituto haciendo Biología sentí que era la asignatura con la que más disfrutaba. Entonces lo que hice fue elegir Medicina, porque los trabajos dedicados sólo a la Biología tienen menos salidas profesionales. Así elegí Medicina como una opción que tuviera más salidas.

P.-Una vez que acabó la carrera, ¿por qué se decidió por la Neurocirugía?
R.-A mi me gustaba mucho la anatomía del sistema nervioso así como la neurología, pero me parecía que la neurología no curaba al paciente, sino que se basaba más en la teoría, el diagnóstico y las pruebas, pero muchas de las enfermedades que trata el neurólogo no tienen un tratamiento curativo.

P.- ¿Dónde se especializó?
R.-Hice mi especialidad en Barcelona, en el Hospital de Bellvitge.

P.-Lleva poco tiempo aquí, en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, ¿qué le parece el servicio, se ha integrado bien?
R.-Sí, llevaba dos años dedicando mucho tiempo a la investigación y empezar otra vez a tratar pacientes ha sido un poco duro. Con los meses ya me he ido adaptando bastante bien.

P.-Dentro de esta especialidad, ¿qué áreas le gustan más y por qué?
R.-A mí lo que más me gusta es la cirugía de tumores cerebrales y, dentro de ésta, la cirugía de tumores en zonas funcionales del cerebro. Esto es lo que más me gusta porque, a diferencia de otros campos de la medicina, tienes dos áreas de trabajo distintas: la intervención quirúrgica y el funcionamiento cerebral.

P.-Sabemos que ha pasado un tiempo fuera de España, formándose en temas concretos de su especialidad. ¿Podría contarnos esa experiencia? ¿Fue becado? ¿Qué tipo de beca le concedieron?
R.-Bueno, pues estuve un año en Estados Unidos y otro año en Francia. A nivel personal ha sido una experiencia muy buena, ya que me ha permitido conocer a mucha gente, así como aprender otros idiomas muy importantes como son el inglés y el francés. A nivel profesional ha sido una gran oportunidad para formarme y, sobre todo, para especializarme en un campo muy determinado de mi especialidad.
Fui con una beca López Albo, que es una beca que concede la Fundación Marqués de Valdecilla, y está destinada a formar médicos especialistas en el extranjero para que luego vuelvan al hospital para aplicar los conocimientos adquiridos. Durante estos dos años he aprendido una técnica quirúrgica nueva para tratar tumores cerebrales en áreas funcionales del cerebro, que es la técnica conocida como Mapeo Cerebral, que consiste en la localización durante la intervención de un tumor cerebral de las zonas del cerebro importantes en la función (movilidad, lenguaje, visión, memoria, tacto…), para evitar dañarlas, y quitar el tumor sin producir secuelas.

P.-¿Qué opinión le merece Valdecilla en comparación con los centros de EEUU o Francia donde ha trabajado?
R.-En Valdecilla existen todos los medios necesarios para realizar un actividad de primer nivel, lo que yo creo que falta es la "súper especialización" de los médicos, que existe en Europa y en Estados Unidos desde hace muchos años, y es lo que mejora significativamente la calidad de la asistencia.

P.-¿Ha podido poner aquí en práctica todo lo que ha aprendido por ahí fuera?
R.-Sí, estamos empezando a aplicar las técnicas que he aprendido y los resultados con los pacientes tratados están siendo muy buenos.

P.-Ya sabemos que es un buen neurocirujano pero, además, se dedica a la investigación. ¿Qué aspectos de la Neurocirugía centran sus proyectos de investigación?
R.-Mis trabajos de investigación se centran sobre todo en la anatomía cerebral, en concreto en el estudio de las conexiones del cerebro y, por otro lado, la investigación en relación con el mapeo cerebral, ya nombrada anteriormente.

P.-Tenemos además que felicitarle, ya que ha conseguido un premio importante en el campo de la investigación. Cuéntenos de qué se trata.
R.-Bueno, se trata del premio que conceden en el Congreso Mundial de Neurocirugía. Se otorga a trabajos de investigación realizados por neurocirujanos jóvenes. A mi me lo dieron en el último congreso celebrado el pasado septiembre en Boston por un trabajo sobre el estudio de la anatomía cerebral. En este trabajo se analiza en concreto una conexión del cerebro, la cual es muy importante en el lenguaje, la visión y la memoria.

P.-¿Qué diría que es lo más satisfactorio de su profesión?
R.- La recompensa de tratar a alguien con una enfermedad grave y ver que el tratamiento ha sido efectivo y el paciente, así como la familia, están contentos con los resultados.

P.-Es bastante joven, ¿qué edad tiene ahora?
R.-Tengo 32 años.

P.-Además de todo esto que nos ha contado, ¿qué aficiones tiene y a qué le gusta dedicar sus horas libres?
R.-Pues me gusta mucho el buceo, el cine, salir con mis amigos, leer…

P.-Finalmente, ¿qué consejo daría a alguien que quiera estudiar Medicina?
R.-Pues que es una carrera muy dura en la que hay que invertir muchas horas y que tienen que tener muy claro que se quieren dedicar a tratar pacientes, pero que luego tiene muchas satisfacciones.

Muchas gracias de nuevo por su tiempo