Recién llegado de México, el grupo vallisoletano 'Celtas Cortos' hacía en Santander su primera parada para presentar 'Introversiones', su nuevo trabajo. Tuvimos la oportunidad de hablar con Jesús Cifuentes, vocalista y ex alumno de La Salle de Valladolid, sobre sus 25 años pisando fuerte sobre los escenarios y su paso por el colegio. "Gracias a La Salle soy la persona que veis hoy", afirmó Cifu, quien destacó que fue en el colegio donde comenzó "a ser músico".

Iván, Jesús Cifuentes y Celia.

La entrevista con 'Cifu' estuvo marcada por su sencillez y sentido del humor. Todos los componentes del grupo salieron del barrio obrero Delicias de Valladolid y algunos hoy viven en el de Girón, lejos de grandes pretensiones.

Pregunta.- Lo primero de todo, ¿de tú o de usted?
Respuesta.- Hombre, ¿a usted que le parece? (risas). De tú, claro, si no sería un poco violento.

P.- ¿Quiénes son 'Celtas Cortos'?, ¿cómo se formó?, ¿de dónde viene ese nombre?
R.- -Es una banda o un colectivo de gente que surgió a mediados de los años 80 en el entorno de un instituto de un barrio de Valladolid, el barrio de las Delicias, y fue el profesor de Francés, que era violinista, el que formó una especie de grupo de música celta y ahí empezó todo. Después nos sumamos gente de otros colegios y nadie podría imaginar que ese pequeño proyecto tomase la envergadura que ha tomado, ni que fuera a ser nuestra forma de vivir, pero lo cierto es que 25 años después con toda la humildad, sí que hemos dejado un rastro importante y hemos podido formar parte de la banda sonora de mucha gente. Así que algo habremos hecho bien. Respecto al nombre, en aquella época 'Celtas' era un tabaco sin filtro, el tabaco popular por excelencia, el más barato, el que fumaba la gente en la universidad. Justo cuando nosotros nos pusimos el nombre el tabaco desapareció, porque no cumplía la normativa europea, ya que era un mazazo importante para el pulmón. La iconografía que tenía el paquete con el guerrero celta con la espada levantada, o sea el concepto de "celta", con el tipo de música que hacíamos, nos gustaba; vamos, que lo habían hecho para nosotros.

Paquete de 'Celtas' y portada de 'Celtas Cortos'.

P.-¿En qué ha cambiado 'Celtas Cortos' desde hace 25 años hasta ahora?
R.- Ha dado muchas vueltas, tantas como la vida misma. Ha habido idas y venidas de los diversos componentes que formaban el grupo en sus orígenes, ha habido momentos en los que el baremo de estar en la cresta de la ola ha sido estar arriba, estar en medio, estar abajo, estar arriba… y todo eso ha ido fluctuando. Tenemos tras nuestras espaldas un 'montonaco' de conciertos, de kilómetros. Acabamos de venir de Guadalajara (México), de tocar en la Feria Internacional del Libro en Castellano. A mi me gusta decir que somos corredores de fondo pero, sobre todo, creo que somos trabajadores de la música, que la vivimos con convicción, y que es el alimento que nos nutre, el motor.

P.-¿Qué ha supuesto 'Celtas Cortos' en la historia del rock español?
R.- Bueno, no sé, eso no te lo tendría que responder yo (risas). Hemos hecho una aportación más en la amplia banda ancha de las emociones. Y creo que lo que hemos aportado en particular es una mezcla de instrumentos y una sonoridad que cuando nosotros empezamos a desarrollarla nadie había empezado aún a hacerlo. Pienso que las cosas que contamos son bastante cercanas y asequibles a lo que pueda sentir una buena comunidad de personas.

P.-¿Cuáles son vuestras influencias a la hora de componer?
R.- Tener suerte, trabajar... hay veces que las canciones te pillan en un momento vital o emotivo por el que salen solas, como si te atravesara una flecha, pero básicamente esto es "pico y pala", estar encerrado en tu estudio y ser perseverante, intentar pulir una idea, porque por una parte está la música y por otra, las palabras. Y como se suele decir, que la inspiración te pille trabajando.

Los reporteros de InterAulas entrevistan a 'Cifu' en el camerino.

P.- ¿Cuál es el último disco que habéis comprado?
R.- Bueno… ya no se compran discos, no sabría decirte. Yo creo que ahora los discos se suelen comprar para regalar a otras personas, es una cosa que no tiene vuelta atrás. La industria discográfica es un dinosaurio en peligro de extinción, la gente está acostumbrada a tener a un click el trabajo de muchos grupos y quien esté más en contra de la piratería es el mayor pirata de todos, aunque no quiera reconocerlo.

P.-¿Los nuevos sonidos, como la música electrónica, han influido a la hora de grabar nuevas canciones?
R.- Bueno, tuvimos una etapa en la que ese registro tenía un peso importante; creo que el disco 'Tienes la puerta abierta' fue el que más tiró de la aparatología y de este tipo de historias. A mi particularmente me gusta. De la misma manera que me puede gustar el flamenco, me pueden gustar determinados sectores del tecno. Una cosa no tiene que estar reñida con la otra. Los músicos tratamos de buscar un sonido orgánico de conjunto y la presencia de la electrónica no es algo que esté reñido con una gaita analógica. No pasa nada.

P.-¿Cómo es posible que un grupo que empezó hace 25 años siga en el candelero?
R.- Eso mismo me pregunto yo también (risas). Siento deciros que no tengo la respuesta, yo creo que el trabajo que hacemos lo hacemos honestamente y somos los primeros que se lo creen y pienso que ir con la verdad por delante es muy importante, ya que ésta es arrolladora en cualquier ámbito que te muevas.

P.-¿Por qué decidisteis hacer un disco con versiones?
R.- Es un disco en tránsito, porque estábamos trabajando en un nuevo proyecto con canciones originales, pero se nos cruzó esta idea por medio y como nunca nos habíamos metido en esos andurriales, y además salíamos de invitaciones que nos pedían hacer distintas versiones, pues dijimos ¡vamos a ponernos a trabajar en ello!. La idea de este disco es mostrar la memoria histórica musical de la que hemos bebido nosotros cuando nos empezamos a formar y sencillamente dijimos "¿por qué no?".

P.-¿Cómo surgió el nombre de 'Introversiones'?
R.- Siendo un disco de versiones trata de mirar en nuestro interior y rescatar el manantial original del que bebimos y, más o menos, nos inventamos ese nombre.

P.-¿Qué opináis sobre la Sociedad General de Autores y Editores, SGAE?
R.- Para los músicos es necesario, es como una especie de ángel de la guarda; lo que ocurre es que creo que el desarrollo de su administración está muy viciado, porque se han hecho tan grandes y tan fuertes que han irrumpido como un elefante en una cacharrería en ámbitos en los que entiendo que no deberían ser tan sangrantes. Pero vamos, que no estoy en contra de ellos, aunque no me guste la forma que tienen de defender a los músicos.

El líder de 'Celtas Cortos' respondiendo a las preguntas.

P.-¿Y sobre plataformas como iTunes y Spotify?
R.- No tengo una opinión muy conformada, lo que sí que tengo claro es que en el infinito espectro digital está el maremágnum de todas las notas musicales que en el mundo han sido y que en este país hay gente que no está acostumbrada a ello, sobre todo teniendo la manera de obtener gratuitamente lo mismo. Yo creo que en ese sentido tampoco hay mucho conocimiento, mucha solidaridad con saber cuál es el trabajo que hacen los artistas y el esfuerzo que está detrás de ello para pensar que eso merezca un precio; pero desgraciadamente es así y, como os acabo de decir, yo no me acuerdo de cuál es el último disco que me he comprado, pero no por otra cosa sino porque el embudo de esta sociedad te está abocando a eso.

P.-¿Utilizáis redes sociales como Twiter, Facebook, MySpace o Tuenti para estar más cerca de vuestros fans?
R.- Sí, hay una persona en el grupo, Oscar García, el bajista, que es el que lleva el calvario de ocuparse de eso. Además en nuestra página web se ha creado una red social propia que se llama 'Gente Distinta' en la que participa toda la pequeña gran familia que somos también nosotros. Es un recurso que a día de hoy como no estés ahí, pues es complicado.

P.-¿Qué preferís, un concierto en un palacio de deportes o uno en un salón de teatro?
R.- Son muy diferentes, yo prefiero de cualquier manera espacios pequeños porque la manera de estar con la gente, el intercambio de sudor es mucho más interno y orgánico. Prefiero recintos de aforo pequeño o mediano que grandes superficies. Os lo digo porque, por suerte, he podido participar en mega conciertos de miles de personas pero, a veces, tú mismo no sabes ni quién eres cuando estás ahí porque el poder de la gente es tan enorme que muchas veces tapa la idea inicial, lo que tu pretendes transmitir.

P.-¿Prefieres un concierto con toda la banda completa o uno acústico?
R.- Cada cosa tiene su momento y su espacio. Nuestro concierto en Santander me resulta muy satisfactorio; además, yo creo que la gente que está acostumbrada a vernos en formato eléctrico y rockanrolero, cuando nos ve de esta manera se lleva una sorpresa, es la baza con la que jugamos y a mi este proyecto me gusta. Me gusta rockanrolear y me gusta soltarme la inexistente melena.

P.-¿Cómo está el panorama musical actualmente en España? ¿Qué abunda, la calidad o la cantidad?
R.- Creo que, como siempre, sigue dominando lo melódico y un poco lo diseñado por las grandes megaproductoras, así que el subsuelo de lo creativo desde luego no tiene muchos trampolines para dar el salto. Entonces estamos repitiendo una manera de actuar y una manera muy solapada de ofrecer realmente las cosas que están haciendo. Hay un montón de bandas y músicos enormemente virtuosos que son los grandes desconocidos y es muy complicado que tal y como está estructurado el mercado, las radios y la gente que crea opiniones de masas, tengan ahí un espacio para salir. Eso es cada vez más complicado.

P.-Si pudiérais elegir solamente una canción de todos vuestros discos, ¿con cuál os quedaríais? ¿Por qué?
R.- No me hagas esa pregunta (risas), porque eso no puedo hacerlo. No sé por qué la gente se empeña en hacer ese tipo de preguntas, porque es como preguntarle a una madre a cuál de sus ocho hijos quiere más. Es una situación difícil.

P.-¿Te gustaría hacer una gira conjunta con otro grupo? ¿Con alguien en especial?
R.- Sí, todo lo que sea ir andando por ahí, arañando rock and roll, es bien recibido. Por ejemplo con 'Calle 13', que según venía para aquí iba escuchándolos en mis 'pinganillos'.

P.-¿Habéis vivido alguna experiencia extraña con algún fan?
R.- Extraña no, pero sí nos pasó el verano pasado en una sala de Londres que al final de un concierto se subieron al escenario unas 25 personas a cantar con nosotros y estuvo muy bien.

Jesús Cifuentes, más conocido como 'Cifu'.

P.-¿Qué pasó el 20 de abril del 90?
R.- No pasó nada en absoluto, es una situación que mezcla una relación del pleistoceno anterior que yo tuve con algo de ficción. No es el reflejo de una realidad, sino una fabulación que se asomó a mi imaginario, no va más allá.

P.- Si es verdad eso que dicen de que la música ayuda a ligar, ¿vosotros después de tanto tiempo debéis tener las agendas llenas, no?
R.- Bueno, yo no (risas), la tengo llena de teléfonos, pero no precisamente de gente con la que haya ligado. Yo creo que estar en este entorno de trabajo nos ha facilitado mucho conocer a cantidad de gente, por suerte, a tener muchísimos amigos en multitud de lugares de este país y del resto del mundo, lo cual es un privilegio. En ese sentido es innegable pero, como decía la canción de 'Los Secretos' "eres gente vulgar al bajarte del escenario", o sea, que no va más allá.

P.- ¿Qué sentido tiene para vosotros 'La Senda del tiempo'?
R.- Ha sido una de las canciones más populares y emotivas que han salido de la historia de este grupo y esto es algo que nos ha ayudado a subir peldaños y que le ha revuelto las emociones a un montón de gente. Significar para mí, significa lo que dice la canción.

P.-Muchas de vuestras canciones se utilizan en nuestras tutorías, convivencias o en las clases de religión. Algo que os distingue del resto de grupos son vuestras letras "protesta", por llamarlas de alguna manera, ¿creéis que es posible mejorar el mundo con la música?
R.- En eso confío, creo que las personas y cada uno en su ámbito de trabajo y de lo que esté desarrollando, cada vez que te levantas por la mañana… eres un motor incandescente capaz de darle la vuelta al mundo, aunque no confiemos en ello. Esa es, desde luego, la intención última oculta que hay detrás de muchas de las palabras. Pienso que al igual que en la música, en la poesía, en el arte, en la literatura y en cualquier actividad, la gente que se plantea ese hecho transcendente pues es un poco lo que estás usando.

P.- Los temas de vuestras últimas canciones giran más en torno a los sentimientos que antes, ¿a qué se debe este cambio?
R.- Nosotros seguimos en esa brecha. No es una bandera que hayamos bajado del mástil, igual nos vamos haciendo más mayores y tenemos otra manera de contemplar la realidad a la hora de escribir; creo que esta formación es uno de los dinosaurios que contemplan de hacer de su música un hecho revolucionario porque, desde luego, lo que sí os puedo decir es que si miras en el horizonte de lo que suena ahora mismo, es como que nosotros fuéramos marcianos, como si hubiéramos salido de otro planeta ¿no? Y es una posibilidad que ni creo que la gran masa social contemple, ni es fácil que se enganchen con eso, por la anomia generalizada que hay, ya que la gente, desde luego, está cada vez más acostumbrada a tener el puño bajado.

P.- Jesús, eres antiguo alumno de La Salle de Valladolid. ¿Qué recuerdos guardas de tu paso por el colegio?
R.- Muy buenos, en verdad, realmente buenos. Fue una etapa muy importante de mi vida. Estuve implicado en la vida interior del colegio, también iba a convivencias y entonces ahí comencé a ser músico. Además, en esa franja de edad me proporcionó un montón de momentos muy emocionantes. Forma parte de que yo sea la persona que soy ahora. Ellos, de alguna manera, me invitaron a ser así o por lo menos parte de la persona que soy está en esas aulas. Me acuerdo de varios de los hermanos que me dieron clase, como Ramón Lomillo que nos metía mucha caña (ríe)y de los hermanos Victor Corral y Antolínez, que eran unas excelentes personas

El concierto de 'Celtas Cortos' en Santander fue un éxito. Además de las nuevas canciones no faltaron sus clásicos '20 de abril' o 'La senda del tiempo'.

Desde aquí queríamos darles las gracias tanto a Jesús Cifuentes y los demás componentes de 'Celtas Cortos', como a nuestro profesor José Javier por habernos concedido algo de su tiempo para que esta entrevista haya sido posible. Muchas gracias.