Tan cerca y tan desconocido, nuestro Mar Cantábrico inspira y es el hilo conductor de nuestra visita al Museo Marítimo del Cantábrico donde descubriremos algunos de los secretos que en este artículo desvelamos. El resto podréis descubrirlos en este museo, el cual os recomendamos visitar.

Posamos en el exterior del Museo Marítimo.

El jueves, 17 de marzo, los alumnos de 3º de ESO del Colegio Santa María Micaela visitaron el Museo Marítimo del Cantábrico con el fin de aprender la historia de la pesca del Mar Cantábrico y las diferentes especies que lo habitan.

A las 10 de la mañana, los alumnos pusieron rumbo con dos profesoras al Museo Marítimo del Cantábrico. Nuestras profesoras nos dijeron que lleváramos cuadernos, ya que teníamos que hacer un trabajo a la vuelta de la visita.

El museo cuenta con unas grandes instalaciones de tres plantas más el acuario y una serie de guías que nos explicaban todo con gran detalle. Dos de las plantas se dedicaban a la historia de la pesca, es decir, a los métodos de pesca, como la pesca de cerco o la de palangre, y también se dedicaba a mostrar a través de maquetas, utensilios e instrumentos que utilizaban los pescadores. Los métodos de pesca no han cambiado. Sigue siendo un método manual.

Hemos conocido técnicas de pesca y tragedias marinas.

Los guías nos contaban historias que sucedieron en la costa cantábrica, como la tragedia que ocurrió en Santander cuando explotó en 1893 el barco Cabo Machichaco, cargado de explosivos que provocó la muerte de 600 personas aproximadamente.
Otra planta está dedicada a diferentes huesos de animales como ballenas o cachalotes y diferentes tipos de peces que se ven disecados. Se puede ver un tipo de pez que posee dos cabezas debido a una malformación.

Somos tres auténticos modelos.

El acuario está formado por una gran cantidad de peces que se encuentran en el Mar Cantábrico. Todos ellos se pueden ver en pequeños acuarios esparcidos por diferentes pasillos con un panel que indican las características de cada pez. Entre estos peces destacamos las momas, las doradas, los sargos, los peces ballesta, los congrios, las mantas ...
Tuvimos la suerte de ver cómo en un acuario una chica daba de comer a todos los peces. Todos ellos iban como locos a por la comida.

En conclusión, fue un día estupendo donde aprendimos a manejarnos sobre el mar y a conocer los diferentes tipos de especies marinas que existen.

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