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II Época / Nº39
Abril
2010
OPINION / TRIBUNA LIBRE

Rodeados de dudas

Por Paula del Olmo Gómez, alumna de 4ºC de ESO del colegio La Paz de Torrelavega.

Si buscásemos la palabra 'vida' en el diccionario de la Real Academia Española nos aparecerían no menos de 20 resultados, cada uno visto desde un punto de vista. El propósito de este trabajo no es mostrar definiciones de lo que es la vida, ya que para ti puede serlo todo o nada, puedes resumirlo en una palabra o escribir 40 folios sobre ella. Yo quiero que indagues en lo más profundo de tu mente, preguntes, dudes… convirtámonos en filósofos por unos minutos

Las interrogaciones inundan nuestras vidas.



Nadie por ser joven dude de filosofar

Ni por ser viejo de filosofar se hastíe.

Pues nadie es joven o viejo

Para la salud de su alma

                                                                                 EPICURO, 'Carta a Meneceo'



Nuestra vida se basa simplemente en preguntas y respuestas, continuas una tras otra, preguntamos porque esperamos la respuesta correcta, esa que nos quite toda duda o nos ayude en un plan futuro deseado. En tu día a día existen un numero altísimo de preguntas que el hecho de serlas en sí no conlleva nada; si tú quieres saber la hora que es para ver si llegas a tiempo para ver el partido, o la película o lo que sea, una vez que yo te doy la respuesta –Las 9 menos cuarto-, te olvidas de la pregunta y te centras en otras cuestiones que te permitan organizarte viendo que no llegas tarde a tu cita.

Pero si lo complicamos un poco más y en vez de la pregunta: ¿Qué hora es?, yo te preguntase ¿Qué es el tiempo?, ¿sabrías contestarme?

Para empezar sea lo que sea el tiempo tú vas a seguir viviendo igual, no vas a cambiar tus planes por el mero hecho de tener esa respuesta. Esto es porque la pregunta por el tiempo no tiene nada que ver con lo que vas a hacer, sino más bien lo que tú eres.

El tiempo es algo que te pasa a ti, algo que forma parte de tu vida y si realmente quieres saber lo que es, es por la frustración de que algo que rija tu vida y que no puedes percibir con los sentidos no tenga un concepto claro para tu cerebro.

Bien, una vez que nuestras cabezas se van abriendo paso y vamos empezando a preguntarnos cada vez más cosas sigamos con el tema de las preguntas.

La filosofía es una forma de buscar verdades y denunciar errores o falsedades que tienen ya más de dos mil quinientos años de historia. Para mí la filosofía es todo aquello que inquieta al ser humano.

A diferencia de todas las preguntas de la vida cotidiana que después dejan de interesarte en cuanto de contestan, la pregunta de qué es el tiempo te intriga más cuanto más te lo intenten responder otros, ya que te pones a ver o a percibir que todo aquello de lo que dependemos tantas veces a lo largo de un día pueda ser algo que no tenga significado propio, exacto, ni una situación en el espacio, ni un origen, ni un final, ni un por qué, ni un destino... Nada.

Vivimos rodeados de circunstancias, momentos, minutos, espacios, lugares, ratos, discusiones, conversaciones, miradas… muchas cosas que son fugaces pero que son muy importantes para nosotros. Veamos en que se resume nuestra vida, todos tenemos una función, trabajar, estudiar, ayudar… todos tenemos siempre un pensamiento sobre algo en nuestra cabeza, pero ¿cómo se plasman todas esas imágenes, palabras, historias en el aire… en nuestra cabeza?, todos sentimos cosas, unas tienen nombre: cariño, amor, odio… pero también sentimos tantas cosas que no somos capaces de reconocer, sentimientos creados por una duda, o por un hecho ocurrido o simplemente por nada que somos incapaces de explicar… ya que todo cuanto nos rodea son dudas.

¿Acaso nunca te has preguntado de dónde venimos?, ¿por qué existimos?, ¿cuál es nuestra misión?... y muchas cosas más.

Tenemos una vida en la cual todos nuestros actos tiene un por y para qué y en la cual creemos que sabemos todo, pero en realidad no sabemos nada; aunque en esto entran muchas categorías: los que creen que lo saben todo (pobres ingenuos), los que no saben nada y los que sólo saben que no saben nada. En esa frase aparece uno de los grandes filósofos de toda la historia, es del siglo XIV, de Sócrates.

Es cierto que todavía quedan cosas sin resolver, y probablemente la mayoría se quedarán sin resolver, pero es cierto que sin estos antiguos filósofos, personas que dedicaron su tiempo a intentar descifrar parte de la vida y a pensar, hoy en día sabríamos mucho menos de lo que en la actualidad sabemos.

Al final, el pasado es necesario para hacer lo correcto en el presente para disfrutar de un futuro.


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