Mario
Camus vino a La Salle, donde estudió en su
adolescencia santanderina, para tener un encuentro
con los alumnos de 1º de Bachillerato, que habían
leído su libro '29 relatos'. Respondió
con sinceridad a cuantas preguntas se le hicieron.
Dejó claro que no hay más mensaje que
el que uno quiere recibir y que daría su opinión
sin pretender ser dogmático; reconoció
dar importancia a unos principios éticos. Advertimos
su gusto por autores como Ignacio Aldecoa, Martín
Gaite, Conrad, Hemingway, Carson McCullers, Dos Passos…
Nombre:
Mario Camus García
Lugar y fecha de nacimiento:
Santander, 20-04-1935
Ocupación:
Director y guionista cinematográfico
Estudios: Derecho
y Cine
Trayectoria:
Su relación con el cine comenzó
a principios de los años sesenta colaborando
en los guiones de 'Los golfos' (1959) y de 'Llanto
por un bandido', de Carlos Saura.
En su carrera como director cultiva todos los
géneros, si bien serán las adaptaciones
literarias las que le proporcionarán
mayor relevancia, principalmente 'La colmena'
(1982), de Camilo José Cela, y 'Los Santos
Inocentes' (1984), de Miguel Delibes.
También ha dirigido destacadas series
televisivas como 'Fortunata y Jacinta', 'Curro
Jiménez', 'Los desastres de la guerra',
'Camioneros' y 'La forja de un rebelde'.
Premios: Ha recibido,
entre otros, el Premio Nacional de Cinematografía,
dos Goya (mejor guión original y Honorífico)
y el reconocimiento en los festivales de Berlín,
Cannes, Durba, Varna o Alejandría. Sus
películas más laureadas han sido
'La colmena' y 'Los santos inocentes'.
|


|
De los actores habló con enorme respeto,
incluso con admiración por su profesionalidad:
"Oficio difícil, muy complicado, se presta
a la esquizofrenia: ser admirado, ser visto, personalidad
muy dividida por los distintos personajes que se interpretan…".
También se detuvo en los actores anónimos
vocacionales con un recuerdo entrañable personificado
en Pascual Costafreda. Manifestó desconocer
a muchos de los triunfadores del momento, salvo si
de niños intervinieron en alguna de sus películas
o son hijos de actores.
|
Mario Camus junto a los tres reporteros de InterAulas.
|
Pregunta.- ¿Es necesario
un gran presupuesto para hacer una gran película?
Respuesta.- Si tienes una película
que necesita cien no puedes utilizar diez. Para hacer
una historia lo primero que se hace es el presupuesto.
El dinero en esta profesión es fundamental,
aunque hay películas buenas con poco presupuesto;
también es importante el tiempo disponible
para grabar.
P.- ¿Cuál cree que
debe ser el fin último del cine?
R.- Se dicen muchas cosas al respecto,
pero el cine para mí debe entretener. El fin
del cine se debería reducir a lo más
simple: entretener y contar historias de la gente
con emotividad.
P.-¿Considera que existe algún
elemento fundamental sin el cual no puede existir
la obra cinematográfica?
R.-Todos los elementos unidos entre
sí son los que hacen la obra. En el cine todo
el mundo depende de alguien, por lo que se observa
una gran solidaridad.
P.-También se ha zambullido
de lleno en el mundo del guión, ¿considera
complicada esta tarea?
R.- Ser guionista es siempre complicado.
El cine cuenta las historias de una forma más
compleja y profunda gracias al guión.
P.-¿Cómo se reconoce
que se tiene entre manos un buen guión?
R.- No hay reglas para eso, nada
te puede decir lo que necesitas. El cine es como un
horno en el que metes experiencias y esperas que luego
en poco tiempo puedas desarrollarlas. Normalmente
sueles notar que es bueno, lo intuyes.
P.-¿Le importaría
contarnos brevemente uno de los sucesos que más
le haya impactado, sorprendido o emocionado a lo largo
de su extensa carrera?
R.-Lo más importante de mi
generación es que hemos vivido tanto en una
dictadura –con una censura terrible- como en
una democracia; y eso implica que hemos vivido con
distintas reglas.
P.-¿A qué edad descubrió
que quería vivir del cine?
R.- Fue en el momento en que hice
mi primera película y me pagaron mi primer
cheque (risas).
P.-¿Le ha servido de algo
la carrera de Derecho en su trayectoria personal?
R.- No, para mí fue una experiencia
fallida. Era muy mal estudiante, la acabé simplemente
por amor propio y no dejarla a medias. No tenía
esa vocación.
P.-¿Cuáles cree que
son los pilares principales para triunfar en este
género?
R.- No creo que sea un triunfador,
solo un currante (risas). Hay que tener imaginación,
experiencias y conocimientos. Hay que leer mucho y
tener poder de observación.
P.-¿No le da miedo que al
adaptar al cine textos literarios españoles
de tanta importancia como 'La colmena', de Camilo
José Cela, se pueda desvirtuar la historia?
R.- No, una historia la leen siete
personas y sacan otras tantas conclusiones. Trato
de no desvirtuar la idea que tengo de la obra en que
me baso. Intento reflejar lo que creo que el autor
de la obra intenta expresar; en este caso, frío,
hambre y miedo.
|
Camus en un momento de la entrevista. |
P.-¿Qué se siente
al ganar un premio tan prestigioso como el Oso de
Oro del Festival de Berlín?
R.- Los premios no me gustan, sinceramente.
Lo complicado para mí es acabar una obra, verla
y pensar que me gusta.
P.- Todas las películas que
ha escrito tienen en común cómo sacar
a la luz antiguas historias del pasado para llegar
al drama. ¿Por qué?
R.-¿Por qué escribo
del pasado? Soy alérgico al cine futurista.
Si no soy partidario del cine futurista queda el presente
y el pasado. El presente es un pasado, así
que en último instante todo tiene relación
con el pasado.
P.-¿Tiene algún recuerdo
especial de su paso por La Salle?
R.- Son muchos. No tengo ninguno
especial. Los hay buenos y malos, recuerdos velados
por el miedo y la tristeza. Lo más importante
de mis recuerdos son las personas que he conocido.
P.- Hoy en día quedan pocos
Hermanos en activo, ¿qué recuerdos tiene
de ellos?
R.- En general, eran curiosos, buena
gente, divertidos, la mayoría positivos. Nunca
tuve ningún problema con ninguno.
P.-¿Cuáles fueron
sus pasos hasta llegar al mundo del cine? ¿Lo
tenía claro desde el primer momento?
R.- Estudié Derecho y luego
Cine. No lo tuve claro hasta los 15 o 16 años,
cuando un Hermano propuso a la clase que diéramos
una charla de aquello que quisiéramos. Yo hablé
de películas que había visto, era todo
un aficionado.
P.-¿Por qué eligió
Pilar Miró el colegio La Salle como escenario
para rodar la película 'Werther'? ¿Tienes
alguna anécdota de este rodaje?
R.- Hice la adaptación del
guión, pero no fui quien lo sugirió,
probablemente se le ocurrió a Javier Artiñano.
No tengo ningún recuerdo del rodaje ya que
no estuve en él.
P.- Desde que empezó, ¿ha
cambiado mucho la forma de hacer cine?
R.- El cine siempre es igual, lo
único que cambia es la cámara. En el
fondo, la historia que se cuenta no tiene variante.
P.-¿Considera que en España
se ha hecho siempre buen cine? ¿Qué
es lo que nos diferencia/separa del cine comercial
americano?
R.- En España se hace el cine
que se puede y hay muy buenos cineastas. En Estados
Unidos, la tercera industria es el cine y España
está colonizada por ellos. La diferencia entre
estos dos tipos de cine son miles de millones de diferencias
(cuando digo diferencias me refiero a dólares)
dedicadas a la publicidad, por parte de EEUU. Tienen
el mundo entero a su disposición. Les hace
ser mejores el número de películas y
el dinero. Tienen una máxima: multiplicar por
dos el presupuesto de cada película para dedicarlo
a su publicidad. Además ellos no tienen que
pagar ningún canon por las versiones de sus
películas en otros idiomas, sin embargo nuestras
producciones y las de otros países son fuertemente
gravadas en el doblaje.
Tras despedirse se asomó a las escaleras que
bajan del jardín al patio y comentó
a su editor que llegó a ser campeón
europeo de baloncesto en los juegos de FISEC. Y añadió:
"Cuando yo estudiaba, en la hora del recreo seríamos
aquí más de trescientos alumnos. Pasaba
aquí algo maravilloso: jugábamos al
fútbol a la vez en el mismo campo todos con
seis balones diferentes con total normalidad".

SUBIR
|
|