Un sueño puede convertirse en una poesía. Alba nos cuenta con versos todo lo que vivió mientras dormía.

Ayer tuve un bonito sueño,
volaba entre las nubes
con un pájaro risueño
que me decía: ¡Sube, sube!

Le hice caso y subí.
Íbamos muy despacio
pero cuando llegué, ¿sabéis lo que vi?
la tierra desde el espacio.

Me lo pasé fenomenal
hasta que vino a despertarme mi madre.
Lo pasé un poco mal
pero no podía llegar al colegio tarde.

Esta noche
volveré a tener un sueño
me quitaré mi broche
y dormiré entre los luceros.