Paneles, cocinas, juegos
solares... El IES Las Llamas se convirtió durante
unos días en un punto de información
teórica y práctica de la energía
solar gracias a la exposición instalada por
los alumnos de 4º de Diversificación.
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Uno
de los paneles solares fotovoltaicos presentes
en la exposición.
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El pasado 27 de marzo
inauguramos en nuestro centro la exposición
'Energía solar: también en Cantabria',
que ha permanecido abierta hasta el 4 de abril. La
exposición intentaba dar información
sobre las energías renovables, con especial
incidencia en la energía solar, así
como datos sobre la producción energética
actual, las previsiones de futuro y las alternativas,
tanto en Cantabria como en España.
Los visitantes han podido
ver directamente el funcionamiento de los paneles
solares, así como el de diversos aparatos (cocinas,
parrillas, hornos, juguetes...) todos alimentados
con la energía del sol. También se contó
con la proyección continua de documentos audiovisuales
específicos y con la realización de
prácticas.
También han contado
con una guía didáctica que les permitía
realizar actividades relacionadas con los materiales
expuestos y obtener un mayor rendimiento de su visita.
La exposición, coordinada
por el profesor Eduardo García Solís,
ha sido instalada por el alumnado de 4º curso
de Diversificación, quienes han participado
también activamente en la elaboración
y montaje de los materiales.
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Dos
de las cocinas solares expuestas para la demostración.
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La muestra
comenzaba con una visita a los paneles solares térmicos
y fotovoltaicos, siguiendo con las cocinas solares,
que resultaron las estrellas de la exposición.
Estas cocinas son de gran utilidad en zonas de nuestro
planeta en las que aún no hay electricidad
y la preparación de la comida supone un esfuerzo
impresionante por la necesidad de acarrear leña
para el fuego desde zonas, en ocasiones, muy alejadas
del lugar de la preparación. Por supuesto este
acarreo de leña incide negativamente aumentando
el nivel de deforestación de estas regiones.
En las cocinas se puede cocinar de todo, freir, asar
o cocer todo tipo de alimentos de forma natural. Además
del ahorro energético que conlleva el uso de
esta cocina, la escasa emisión de anhídrido
carbónico que produce ayuda a disminuir el
efecto invernadero, economizando la principal materia
prima utilizada en los países desfavorecidos:
la madera. Estas cocinas
las comercializa en España la empresa catalana
Terraorg, que dedica parte de los beneficios que obtiene
de las cocinas, concretamente el 20% de su coste,
a proyectos de desarrollo en el tercer mundo y para
enviar las cocinas a los países que tienen
grandes dificultades para comer y cocinar. Otra utilidad
de estos aparatos es para potabilizar el agua (otro
de los graves problemas del tercer mundo).
En otra sala
podían contemplarse varios paneles informativos
que mostraban las ventajas, los inconvenientes (cuando
los hay) y las dificultades de las distintas energías
renovables. En los paneles se recogía información
del Protocolo de Kioto, de las diversas energías
renovables y, en especial, de la energía solar.
Esta sala tenía dos partes: una observable
y otra manipulativa y práctica. En la zona
observable teníamos dos bombillas, una de consumo
normal y otra de bajo consumo, conectadas a dos contadores;
así podíamos ver como el contador conectado
a la bombilla de bajo consumo apenas si se mueve.
En la parte práctica, los estudiantes podíamos
manejar una serie de juegos solares, elaborados por
los alumnos y alumnas de 4º de Diversificación:
molinos, carruseles, coches, aerogeneradores, todos
ellos movidos por energía solar.
Una parte importante
del material expuesto en esta sala estaba dedicado
al informe 'Renovables 2050', elaborado por Greenpeace
y en el que se analizan las necesidades, la producción
y la potencialidad energética de las diversas
regiones españolas, en la actualidad y hasta
el año 2050. El apartado referente a Cantabria
nos muestra con claridad cómo nuestra región
puede ser autosuficiente sólo con la energía
solar fotovoltaica, con la eólica o con la
mareomotriz. Evidentemente es un futuro lejano, pero
hay que empezar a dar los pasos.
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Un
momento de la visita de un grupo de alumnos
a la exposición mientras reciben las
explicaciones de Eduardo.
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Al respecto,
uno de los visitantes de la exposición, el
concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Santander,
Iñigo de la Serna, señaló la
obligatoriedad de instalar paneles solares en los
edificios de nueva construcción a partir del
próximo mes de noviembre.
Nuestros visitantes
más pequeños, los de los colegios de
la zona, podían llevarse un pequeño
recuerdo de su visita: una acuarela mezclada en un
aparato giratorio alimentado por energía solar,
un detalle individualizado para cada uno de ellos.
La visita terminaba
con el visionado de un DVD sobre la huella ecológica,
en el que se hacia un repaso a los malos hábitos
energéticos que acostumbramos a usar y a las
alternativas para ellos.
Un éxito
para la exposición que fue visitada por más
de 900 personas durante los siete días que
permaneció abierta al público, y un
éxito para nuestros compañeros que ayudaron
activamente a su realización.
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