| Toda la comunidad educativa
del IES José del Campo de Ampuero, profesorado,
padres y madres, alumnado y personal de administración
y servicios, así como muchos vecinos de Ampuero
y de localidades vecinas, quisieron colaborar en la
campaña de recogida de material de primera
necesidad con destino a los campos de refugiados en
Grecia. Fruto de esta colaboración fue que
en poco más de dos semanas se consiguió
reunir material para cargar seis palés de productos
de todo tipo, desde alimentos a pañales para
bebés o calzado, mucho calzado.
A lo largo de varios días,
profesorado y alumnado catalogaron, clasificaron y
empaquetaron todo el material para su traslado al
puerto de Valencia, desde donde se transportó
vía marítima al puerto griego de Ellinika,
en Atenas, donde se almacenará hasta su reparto
por las ONGs colaboradoras según las necesidades
que tengan en cada momento.
La acción, coordinada por
las profesoras Carol Fernández Luengo y Alexandra
González Rodríguez, respondía
a la participación de Ampuero en la III Campaña
Humanitaria iniciada por 'SOS Refugiados', tras las
campañas denominadas 'Lesbos' y 'SEUR Atenas',
con el objetivo de enviar materiales de primera necesidad
a los campamentos de refugiados de Atenas y sus alrededores,
así como a los centros de acogida en la capital
helena atendidos por voluntarios, en su mayoría
españoles. La logística del transporte
corre a cargo de la Fundación SEUR, que fue
la que recogió los palés en el instituto
de Ampuero para trasladarlos a Valencia.
Con el fin de implicar no sólo
a la comunidad educativa sino a toda la población,
se colocaron carteles por el pueblo para animar a
la participación. "La respuesta fue espectacular",
señalaron las coordinadoras, "y empezaron
a llegar a Conserjería del centro bolsas y
más bolsas de todo tipo de productos".
En los carteles se habían indicado los productos
que se necesitaban, de forma que la labor en el Instituto
se simplificó a la selección, catalogación
y empaquetado. El coste de traslado de los palés
a Valencia era de 60 euros cada uno, que se recaudaron
sin problemas con aportaciones del profesorado y de
padres y madres.
El listado de artículos necesarios
incluía la recomendación de que en caso
de alimentos no contuvieran cerdo, ya que la gran
mayoría de refugiados son de religión
islámica. Se enviaron muchos productos de higiene
personal, menaje del hogar, productos de limpieza
y, como dato curioso, muchas compresas y tampones
para las mujeres de los campos de refugiados.
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