Una
enfermedad rara es una dolencia muy poco común
que los médicos sólo lo ven una vez
al año, son casos muy contados en el mundo
y son conocidos gracias a internet y a la televisión.
Se llaman enfermedades raras porque afectan a un número
reducido de la población. Estas enfermedades
graves ponen en riesgo la vida de los enfermos ya
que han sido conocidas muy tarde y poco estudiadas
y su tratamiento la mayoría de las veces es
inadecuado, por la ausencia de medicamentos investigados
para un número tan pequeño de pacientes.
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Un médico
observa a David Vetter, el 'niño burbuja'. |
Estas enfermedades raras casi siempre presentan
las mismas características. Son degenerativas
y suelen poner en riesgo la vida del paciente; además
son crónicas, con un alto nivel de dolor y
sufrimiento y una pérdida de autonomía.
Hay algunas enfermedades que son vistas desde el nacimiento,
como la amiotrofia espinal infantil, pero hay muchas
que aparecen en la madurez, como la esclerosis lateral
amiotrófica. La enfermedad varía según
el paciente y el grado de afección.
Hay muchos tipos de enfermedades raras, pero todas
tienen unas características comunes: la mayoría
tienen un origen desconocido, suelen conllevar problemas
sociales, aparecen con muy baja frecuencia (afectan
a 5 de cada 10.000 habitantes), presentan dificultades
de seguimiento y diagnóstico y se investiga
poco sobre ellas, porque al afectar a un porcentaje
muy bajo de la población; científicamente
se trabaja más con enfermedades que afectan
a un amplio grupo de personas.
Estas enfermedades se unen todas en este mismo grupo
con el fin de reunir esfuerzos para su investigación
y despertar interés social.
En la actualidad, para evitar enfermedades raras transmitidas
de forma hereditaria, se puede manipular genéticamente
de forma que se aíslen los genes que transmiten
la enfermedad y que se conserven sólo los sanos.
En España es un proceso que ya se está
realizando, como con el caso de la hemofilia, en el
que la madre se lo transmite sólo a los hijos
varones, y las hembras suelen ser las portadoras de
la enfermedad.
Unos de los casos más conocidos de enfermedades
raras es la del llamado 'niño burbuja' (SCID,
Inmunodeficiencia combinada severa). David Vetter
nació en EEUU y desde el momento en que llegó
al mundo vivió aislado en una burbuja de plástico
(de ahí el nombre de la enfermedad) para evitar
el contacto con todos los virus del exterior, ya que
no tenía sistema inmunológico y cualquier
germen o virus (hasta los que para las personas normales
resultan inofensivos) le podría causar la muerte.
El único contacto que tenía con el exterior
era mediante unos guantes de plástico, pegados
a la burbuja. Sus padres vivían con la esperanza
de que se encontrase cura a su enfermedad. Pasaron
varios años y esa cura no llegaba, pero la
NASA les ofreció un traje hecho a la medida
de David para que pudiese salir de la burbuja y andar
por su cuenta, fue un fracaso. A David le habían
inculcado desde pequeño miedo a los gérmenes
y vivía pensando en ellos, así que sólo
se puso el traje unas tres veces. Como último
recurso, decidieron extraer la sangre de la médula
ósea de la hermana de David e introducírsela
a él; parecía que todo iba bien, pero
un día David empezó a vomitar sangre,
a tener diarrea y le subió la fiebre. Los médicos,
con el consentimiento de los padres del niño,
decidieron trasladarle a un hospital con la habitación
esterilizada totalmente e intervenirle. Unos meses
después, el día 22 de febrero de 1984,
los padres de David pudieron tocar por primera vez
su mano y, minutos después David falleció
de cáncer, ya que la sangre de su hermana estaba
infectada con un virus que no se a llegado a detectar.
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Cartel conmemorativo
del I Día Europeo de las Enfermedades
Raras. |
Otra enfermedad rara es la llamada 'huesos de cristal'
(osteogénesis imperfecta, OI) que se basa en
un defecto genético. Los genes defectuosos
son los de la producción del colágeno
que origina un trastorno que debilita los huesos,
crea muchas fracturas y no crecen de forma apropiada.
La enfermedad se presenta de tres formas: la primera
es de forma leve, con posibilidad de vida normal;
la segunda, la moderada, está determinada por
la deformidad de la estructura ósea y las graves
con la muerte al poco de nacer. Hasta el momento no
tiene ningún tratamiento clínico que
solucione el defecto de la estructura ósea.
Una buena nutrición y ejercicios como la natación
sirven para reforzar la fortaleza ósea y muscular.
Un caso muy conocido en España es el de la
niña Vanesa Jiménez, que a los tres
años le diagnosticaron una enfermedad muy poco
conocida y le dijeron a su madre que iba a vivir siete
años. Tiene un tumor en la cabeza, en un ovario
y en las carótidas, una disnesia, problemas
de corazón y huesos de cristal. Ha tenido numerosas
fracturas en las piernas, en la cadera y los brazos
se la van curvando pero, a pesar de todo, Vanesa es
una chica muy luchadora. En el año 2001 creó
la fundación 'Vanesa' para ayudar a niños
con enfermedades raras para que puedan tener ayudas
económicas, domiciliarias, asistenciales, de
transporte, comida especial y aparatos ortopédicos.
Y para recaudar más dinero se dedica a dar
conciertos por toda España con el cantante
Héctor (de Operación Triunfo). Vanesa
tiene veintiséis años y a pesar de su
enfermedad se siente una chica muy feliz.
Actualmente hay muchos centros y asociaciones que
dan ayuda a las personas que padecen alguna de estas
enfermedades y a sus familiares, cada vez se investiga
más sobre estos temas y se espera que se pueda
avanzar.
Más información:
http://www.enfermedades-raras.org/
http://www.fundacionvanesa.com/
http://www.saludlandia.com

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