Logotipo Interaulas
Cabecera Red-acción Inicio > Cultura > Galería de arte
Reportajes
Entrevistas
Opinión
Cultura
Internet
El mundo
Medios
Imagen Primaria
Red-acción
Nº 49
CULTURA / GALERÍA DE ARTE

Conversación con dos personas ausentes

Por alumnos del IES Valle del Saja de Cabezón

Dos alumnos expresan sus vivencias en dos relatos intimistas que dirigen a un amigo y a un amor difícil. Ambos han optado por no descubrir su identidad.

Carta a un amigo
El Querer

 

 

 


Carta a un amigo
Por J.A.G.B., alumno de 4º ESO

Querido amigo, ¿qué tal estas?
Espero que al recibo de mi carta te encuentres bien: yo me encuentro muy bien. Hace tiempo tú sabes que todo se me hacía muy cuesta arriba pero, gracias a una persona que se ha cruzado en mi camino, ahora todo me parece distinto. Vivo cada momento de mi vida con más alegría, he empezado a ver las cosas de manera diferente, tengo más interés por los estudios, quiero prepararme para tener un buen futuro si es posible; ser una persona honrada, trabajadora y sana, muy sana en cuerpo y mente, creo que eso es muy importante.

Me da pena cuando veo tanta miseria, cuando salen las noticias en la televisión y veo tanta gente que se queda sin hogar o no tiene comida y se les pasa la vida en un suspiro sin poder disfrutar tantas cosas buenas que hay en ella, es injusto que muchos tengan tan poco… casi nada, y los que tenemos casi todo no lo sepamos valorar. Yo veo la vida como algo bello, que hay que disfrutar cada segundo, que la vida tiene cosas malas y tristes pero también tiene cosas bonitas y alegres; entonces, creo que hay que aprender a vivir el momento, saber llevar ese lado bueno o malo según nos venga de la mejor manera posible; pero no cerrarse en uno mismo y volverse tan egoísta, hasta el punto de querer ser el centro del mundo. Me gustaría poder llegar a alcanzar el sueño de mi vida, que sería poder dedicarme al deporte; quiero decir que pudiese trabajar en algo relacionado con el deporte, poder formar un hogar con la persona que quiero y, eso sí, tener hijos porque me encantan los niños. Debe de ser porque en mi familia siempre he estado rodeado de bastantes niños. Me gusta estar en familia, con mucha gente, se lo pasa uno de fábula.

En fin, esta es mi forma de ver la vida, algo muy bonito de lo cual hay que disfrutar al máximo pero con tranquilidad y en paz con todos. Recibe un gran abrazo de este gran amigo que no te olvida y espera verte muy pronto.
José

P.D: Hazme un favor ¡Vive la vida con mucha alegría, porque sólo son dos días!

 

El querer
Por una alumna de 2º B ESO.

Quiero que llegue ese día en el que vuelva a nacer, que pueda mirarte a la cara, sin saber quién eres, que pueda hablarte de todo sin saber tu nombre, que pueda besarte en la cara sin que me mires con cara rara, que me quieras como soy y que no me busques errores, que pueda sentarme cerca de ti y me hables, pero lo que más deseo es que nos volvamos a querer sin errores, sin distancias, ni favores, sin nadie que se meta en nuestras vidas, porque quiero quererte como antes, sin que nadie lo note, que me quieras a escondidas, que me mires con prudencia, que me toques sin que lo note, que te busque en el presente, que no encuentre el pasado, que fue un corazón armado.

Quiero que mi corazón sienta tu mano, que mi pelo vuelva a tu lado, que mi boca ría sin ti, y que mis ojos no lloren por ti.

Quiero querer a ese corazón soldado, a esa boca hambrienta, a esos ojos fumados, a ese pelo pinado.

A tu lado era feliz, ahora soy un mundo que quiere volver a reír, que no quiere verte sufrir, que no quiere verte llorar, y que quiere verte reír.

Y te quiero como eres y no como finges ser, porque te quiero y no sé como volver donde ti y tampoco quiero volver a sufrir. TE QUIERO.

Algún día podré decirte lo que siento y podré volverte a mirar a la cara, pero ahora de momento dejemos la cosas como están, porque no podría volverte a mirar después del daño que me hiciste y lo que tuve que pasar.

 

 

'El grito', 1893
El grito es la obra más importante de Munch, de la que hizo cuatro versiones entre los años 1893 y 1895
"Caminaba yo con dos amigos por la carretera, entonces se puso el sol; de repente, el cielo se volvió rojo como la sangre. Me detuve, me apoyé en la valla, indeciblemente cansado. Lenguas de fuego y sangre se extendían sobre el fiordo negro azulado. Mis amigos siguieron caminando, mientras yo me quedaba atrás temblando de miedo, y sentí el grito enorme, infinito, de la naturaleza".