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Red-acción
Nº 106
Enero-Febrero
2013
OPINIÓN / TEMA DEL MES

Abre los ojos

Por el equipo de redacción de 2º de Bachillerato del IES Valle de Camargo.

Los alumnos de 2º de Bachillerato del IES Valle de Camargo han preparado textos argumentativos partiendo de una charla impartida en su centro por el juez Agustín Alonso sobre la violencia de género. Además, reforzaron sus opiniones con la lectura de 'Malala y Savita', texto del columnista Mosiés Naím publicado en 'El País'.

Manifestantes protestan por la muerte de Savita Halappanava, dentista de 31 años que falleció porque no se le practicó un aborto. / PETER MUHLY (AFP)

 

VIOLENCIA DE GENERO
Por Diego y Eduardo Pacho

Las historias de Malala y Savita le han recordado al mundo que el oscurantismo no es un fenómeno del Medievo. Está muy presente y todavía se cobra vidas en el siglo XXI.
                                                     Moisés Naïm, El País, 18 de noviembre 2012



Año 2007: 71 mujeres asesinadas.
Año 2008: 84 mujeres asesinadas
Año 2009: 68 mujeres asesinadas
Año 2010: 73 mujeres asesinadas
Año 2011: 64 mujeres asesinadas
Año 2012: 46 mujeres asesinadas

http://www.asociacionhierbabuena.com/node/40

Se considera violencia de género tanto agresiones físicas como también psicológicas. La violencia de género con el paso de los años ha sido uno de los principales temas comentados en los medios de comunicación de masas y pese a las continuas campañas contra la violencia de género, en especial contra el machismo, el número de víctimas sigue aumentando cada día, en España y en el mundo. Esta violencia, normalmente, viene desencadenada sobre la supuesta superioridad que tienen los hombres sobres las mujeres y es por eso por lo que ellas sufren maltratos físicos, abusos, amenazas. ¿Cómo podemos pensar que en la tribu de los Yanomami, el estatus de las mujeres se mide a partir de las palizas que reciben de sus maridos? Es algo absurdo, sin embargo, esas culturas lo ven como algo natural que realizaban sus antepasados y ellos hacen lo mismo. Las estadísticas muestran aquellas mujeres que denuncian a sus maridos o llaman al número contra la violencia de género, pero todas aquellas que callan y siguen sufriendo maltratos psicológicos, no sabemos nada de ellas. Este problema, todavía se puede erradicar y tiene solución. Si el Gobierno impusiera leyes mas estrictas a las personas condenadas por cometer violencia de género y todas las personas que lo sufren, lo denunciaran, veríamos reducido el numero de mujeres asesinadas ya que antes de que una mujer muera a manos de su marido, como norma general, ésta ha recibido con anterioridad amenazas, agresiones físicas que puede denunciar para así evitar un desastre mayor.
Es un tema conocido mundialmente, y pese a esto sigue y seguirá habiendo mujeres que están sufriendo en sus propias carnes estos casos pero, desgraciadamente, algunas lo denuncian demasiado tarde o, incluso, algunas no llegan a denunciar porque lo ven algo "normal". En España durante la dictadura, la discriminación de la mujer y la consideración de la mujer inferior frente al hombre en todos los sentidos era algo "habitual". Desde los inicios de este año, 45 mujeres han sido asesinadas.

El juez Agustín Alonso fue invitado a nuestro centro por la profesora responsable del programa de igualdad. Impartió una charla sobre el papel de la justicia en todo este asunto. A pesar de los escalofriantes datos, la justicia realiza un papel ineludible en este tema, ya que muchas mujeres tras la denuncia han conseguido órdenes de alejamiento, gracias a las cuales las mujeres han podido encontrarse en una situación más cómoda frente a la tensión en que viven sometidas. Tensión y miedo.
Pero los representantes de la justicia, además de dictar sentencias, también tienen la función de "inspectores", ya que pese a que la mayoría de las denuncias que se ponen son verdaderas, la justicia también se encuentra con denuncias falsas llamada "Falsa Violencia de Género". Este tipo de denuncias están aumentando y hombres inocentes en algunos casos han ido a prisión, solo por la voluntad de una madre de conseguir la custodia de sus hijos en caso de divorcio o subvenciones o ayudas económicas. Con la justicia no es con algo con lo que hay que jugar, puesto que una denuncia falsa “entretiene” a la justicia y la desvía de la atención a los verdaderos y sangrantes casos de violencia machista que se dan en este país. Por eso, los casos de Falsa Violencia de Género están siendo castigados con cierto rigor, ya que la gente se tiene que dar cuenta que están jugando con vidas.
Me temo, que pese a todos los avances de la justicia en este tema, la labor de los medios de comunicación y entidades de apoyo a las mujeres para que denuncien, si no se crea algo "innovador", distinto a lo que se está haciendo que se demuestra ineficiente, los 45 asesinos que se llevan contabilizados en este 2012, se verán acompañados en su macabro comportamiento algunos más antes que finalice el año. El cambio está en nuestras manos.

 


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DÍA INTERNACIONAL DE LUCHA CONTRA LA VIOLENCIA HACIA LAS MUJERES
Por Fernando García González y Rubén Ansorena

La mujer siempre ha sido considerada inferior al hombre, prácticamente en todo el planeta, desde hace siglos. Pero se ha tenido constancia y se ha intentado erradicar esta discriminación y este maltrato desde hace unos pocos años en ciertas zonas del mundo. Pero en decenas de países, principalmente subdesarrollados, se sigue considerando a la mujer como un objeto, una posesión del hombre.
La verdadera causa de esta violencia es, como se ha mencionado al comienzo del texto, el machismo y el hecho de que se integrase en nuestra cultura en el pasado. Esto hace complejo acabar con ello ya que, de alguna manera, formó parte de las enseñanzas y costumbres de la población de nuestro país durante siglos. Ese hecho de superioridad, de intención de control de la pareja es lo que lleva a los insultos, las agresiones y en algunos casos la muerte de mujeres, no solo en nuestro país, si no en todo el mundo.
Pese a llevar ocurriendo esto durante tantos siglos, la ley empezó a actuar en estos casos muy a finales del siglo XX y la ley actual, la que se podría considerar como el primer paso serio para acabar con la violencia doméstica, se promulgó en 2003. A pesar de ser la primera ley en la que se toma la violencia machista como el problema serio que realmente es, todavía hay muchas clausulas que permiten que los acusados no sean condenados, por diversos motivos, e incluso que dejan la decisión en la subjetividad del juez que instruya el caso. El juez Agustín Alonso, en una amena charla, directa y en un estilo riguroso, nos explicó a las alumnas y alumnos allí presentes la situación de la violencia de género desde el punto de vista judicial en España.
Además se deben de tener en cuenta que muchos de estos casos no se llegan a denunciar siquiera, por lo que en ellos la ley no puede actuar. Además también hay muchos casos en los que a pesar de haber sido denunciados se llegan a acuerdos entre ambas partes y las condenas no se cumplen; y también existen casos en los que a pesar de la existencia de una denuncia, la mujer se niega a declarar por diversos motivos y por falta de otras pruebas se acaba absolviendo al acusado.
En resumen, el maltrato y la violencia de género no se han empezado a tomar realmente en cuenta hasta finales del siglo XX y en muchos países aún no se tiene en cuenta en absoluto. Todo esto se debe a la asimilación cultural de nuestros antepasados de la supremacía del hombre sobre la mujer y la permanencia de ese pensamiento a lo largo del tiempo y esto hace que sea tan complicado erradicarlo en nuestros días. Además, a pesar de existir leyes contra la violencia machista, todavía existen casos, ya sea por subjetividad, por falta de pruebas u otros motivos en los que todavía no se puede condenar por este hecho a muchos maltratadores, a pesar de que siguen muriendo decenas de mujeres cada año.
Pensamos que, para evitar la violencia de género, se debe educar desde pequeños a los niños y niñas en igualdad de condiciones, ya que cuando alguien es adulto es muy difícil provocar un cambio en sus creencias o en su modo de percibir la igualdad. Por otro lado, en países en los que predominan algunas religiones en las cuales se trata a las mujeres como seres inferiores a los hombres es mucho más difícil provocar ese cambio de actitud en la forma de pensar. En esos países creo que un modo de convencerles para evitar la violencia de género es promover la igualdad en el resto de países y que estos sirvan de espejo en esta aldea global, aunque la influencia que ejerce la religión sobre las personas obliga a confiar en unos plazos muy largos. A su vez la causa de esa violencia viene por la idea de que la mujer es la que debe trabajar en casa y tener complacido al marido, esto se puede apreciar perfectamente en lugares poco desarrollados, como zonas de África o Asia en las que los hombres trabajan muy poco mientras que las mujeres realizan todo el trabajo (incluso el trabajo físico, el cual se supone que debería hacer el hombre debido a que tiene más fuerza que la mujer).
A modo de conclusión, hemos de resaltar la importancia que tiene promover la igualdad entre hombres y mujeres desde la infancia, ya que logrando promover esa igualdad las personas podremos reflexionar acerca de ello y ya intentar lograrlo poco a poco en una escala mundial.
Entre tanto más de 40 muertes, ¿hasta qué punto se llegará antes de que se cree una ley contra la violencia de género completamente efectiva?



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VIOLENCIA DE GÉNERO
Alejandro Cuadrado y Luis Mier

Uno de los problemas más importantes que afectan a la sociedad española es sin duda la violencia de género, un tipo de violencia producida por el hombre sobre la mujer. El agresor utiliza el miedo para crear una situación de sumisión y dominación, ese miedo es generado a través de golpes, insultos, amenazas. Estas muestras de violencia se manifiestan en distintos ámbitos sociales, tales como los domésticos, familiares o intrafamiliares, y a distintos niveles de maltrato, no solo el físico, sino también el sexual, psicológico, económico o espiritual .
La desigualdad entre mujer y hombre ha existido desde el inicio de los tiempos Desde que los humanos vivían en las cuevas del Paleolítico, hasta nuestros días, aún con todo el desarrollo social que llevamos a nuestras espaldas, decenas de mujeres mueren a manos de sus parejas o ex-parejas cada año.
Prácticamente ninguna religión es inmune al machismo ya sea porque es parte de sus principios o por las interpretaciones que se han hecho posteriormente. La cultura romana, aún con su indudable esplendor, ejercía violencia contra las mujeres, dejando frase tales como “el varón es la cabeza de la mujer” donde claramente degradan la capacidad intelectual de las mujeres. Más tarde, han sido muchos los predicadores defensores de la subordinación de la mujer frente al hombre como lo fueron Santo Tomás de Aquino o Lutero. Y más tarde, con manifestaciones literarias y cinematográficas absolutamente machistas. Hoy en día estas manifestaciones, aunque poco habituales, siguen manchando nuestra sociedad tan supuestamente avanzada, como uno de los casos más degradantes de los últimos tiempos, en el que un imán saudí mostraba en televisión los pasos a seguir para pegar a una mujer, sin dejar rastro.
Al comparar la situación histórica con la actual, y aunque es cierto que respecto a décadas pasadas los casos de desigualdad y de violencia de género han disminuido, notamos que es imprescindible erradicar un problema que parece asentado en la sociedad. La violencia de género ha de ser combatida a partir de dos focos principales: la educación y la justicia. De la primera no son solo responsables los profesores y el sistema educativo sino que sobre los padres recae la tarea fundamental de enseñar valores a sus hijos. Además, es impensable un sistema educativo de calidad que eluda cuestiones como la desigualdad entre mujer y hombre.
Por otra parte, la justicia se debe de encargar de defender a la víctima del maltrato físico o psicológico. Desde el Código Penal de 1973 que no recogía ninguna protección específica de la víctima de malos tratos hasta la Ley Orgánica 3/2007 para la igualdad efectiva de mujeres y hombres, se ha avanzado notablemente en cuestiones legislativas. Sin embargo, todavía existen ciertas leyes y atenuantes legales que pueden ser aprovechados por el agresor. Un ejemplo sería la no consideración por parte de las leyes vigentes como violencia de género a la violencia ejercida por un hombre sobre una mujer al no existir relación entre ambos sujetos.
Argumentos y casos como los expuestos, dejan claro que aún queda mucho trayecto para erradicar esta lacra social que es la violencia de género, aunque si bien es cierto que estos comportamientos son más habituales en países con ideologías religiosas extremistas, como la musulmana, en la que diariamente se dan casos de violencia de género, y por preocupante que resulte, una gran cantidad de ellos quedan sin castigo ya que realmente se tiene la creencia de que, de alguna manera, la mujer es inferior al hombre.
El 25 de noviembre es solo una fecha, la lucha contra la violencia de género debe ser característica del día a día y todos debemos ser participes de esa lucha, solo así seremos capaces de acabar con cualquier situación de desigualdad. Además de la lucha particular sería necesario cambiar las leyes que perjudiquen a las víctimas de maltratos y acabar con los futuros maltratadores de raíz.
Y por casos como estos es realmente urgente que la humanidad sea consciente de este problema y haga lo posible por exterminarlo.



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ABRE LOS OJOS
Paula Gutiérrez Arce y Anais Hernández

El día 25 de noviembre del año 1999 fue declarado, con carácter oficial Día internacional de la violencia de género por la ONU, un problema sobre el que no podemos cerrar los ojos y sobre el que debemos trabajar.

La violencia de género se debe a la desigualdad que genera un desequilibrio del conjunto fuerza-poder-dominio, que hace que los hombres se encuentren en situaciones de dominación. Se puede manifestar de muchas formas (física, psicológica, sexual, económica, espiritual...) pero en todos los casos se trata de algo producto de una cultura machista, no del sexo de las personas. No es necesario que haya una agresión física. Puede haber malos tratos sin causar lesiones, visibles cuando un hombre coloca a una mujer en una situación violenta, por ejemplo, haciéndola sentir interior. Normalmente, los malos tratos empiezan por ahí, causando menoscabo psíquico. Sin embargo, cuando llega a los tribunales es porque ha habido lesiones, y se consideran agravantes que ocurra en el domicilio común o de la víctima, que se usen armas y que ocurra en presencia de menores. Desde 2007, en España se estableció por la ley orgánica la igualdad efectiva entre hombre y mujeres, y este tipo de pasos hacen que la sociedad avance.

La superioridad de la figura del hombre sobre la de la mujer es un tema que permanece desde los años más primitivos hasta la actualidad en nuestra sociedad. Esto se hace visible en situaciones en las que el papel que ejerce la mujer tiene una menor importancia o se encuentra en una categoría inferior a la del hombre. El hecho de que algunas mujeres hayan puesto su granito de arena para cambiar este punto de vista ha dado como resultado la violencia ejercida contra la misma, o también llamado violencia de género. La situación en la que se suele realizar este maltrato suele ser en el ámbito de la pareja, por ejemplo, en momentos en los que la mujer recibe un salario mayor al del hombre o porque la mujer no se encarga de las labores domésticas. Además, la violencia se ejerce también en el ámbito laboral, familiar, etc. aunque con menos frecuencia.

Poco a poco las mujeres han sacado coraje para enfrentarse a la sociedad y han ido alcanzando el mismo nivel que el hombre y esto es solo gracias a mujeres como Matilde Hidalgo de Porcel (primera mujer en ejercer formalmente el voto) o María Elena Maseras Ribera (primera mujer matriculada en la universidad española). Personalmente, creo que ¿vivimos en el siglo XXI para avances como el de las tecnologías pero no para que la mujer y el hombre estén a la misma altura? El hombre y la mujer son iguales, seres humanos, y no deben de valorarse uno más que otro, ni la mujer debe hacer todas las actividades domésticas ni el hombre, pueden ser compartidas.

Es, por tanto, un trabajo de transformación social, intenso y cotidiano, el que tenemos por delante, en todas y cada una de las esferas en las que nos movemos, para que el 25 de noviembre deje de ser una fecha de necesaria reivindicación. Pensamos que la educación y la cultura es la vacuna contra la violencia. Y se empieza en casa y en las aulas.

 


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Los expertos alertan de que el maltrato físico suele estar precedido por el maltrato psicológico

Una sección en la que opinar de un tema de actualidad