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este año y el pasado, dos institutos de Santander
celebramos nuestro aniversario y, además, con
un pasado común. Con motivo de las actividades
de hermanamiento, se ha realizado una carrera solidaria
a beneficio de una ONG.
El pasado 4 de mayo, alumnos y profesores de los
institutos José María Pereda y Santa
Clara, que acabamos de celebrar 50 y 100 años
respectivamente, participamos una carrera solidaria
en el Parque de Las Llamas.
Nuestra solidaridad era para la ONG Aymy. Lucía
Lantero, santanderina y fundadora de esta organización,
tras un viaje de tres meses a República Dominicana
y encontrarse con cinco niños comiendo tierra
tras el terremoto de Haití y sin nadie que
les pudiera ayudar, decidió no desentenderse
y comprometerse con ellos. Hoy día, tras seis
años en Haití y mucha lucha, han construido
un orfanato escuela y tiene a su cargo a 50 niños.
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Calentamiento
para la carrera. |
Antes de hacer la carrera llegamos al parque caminando.
Una vez allí, tuvimos un pequeño calentamiento
con una chica que vino de GO FIT.
Después de terminar el calentamiento nos pusimos
en la zona de salida los alumnos y algunos profesores
de los dos institutos.
Los que queríamos correr teníamos que
dar dos vueltas, un total de 3,200 km, mientras que
los que iban andando solo tenían que una vuelta:
1,600 km.
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La carrera
fue en el Parque de Las Llamas. |
No era una competición, por lo que lo importante
no era llegar el primero. Al finalizar la carrera,
después de pasar por la meta te daban botellines
de agua para refrescarte y esperabas a que terminaran
los demás.
Después de que todos los alumnos de los dos
institutos pasaran por la línea de meta, varios
profesores del José María Pereda y el
Santa Clara hicieron un sorteo entre los participantes.
De una bolsa cogían una bola con un número;
si te tocaba el número que tenías en
el dorsal pues te podía tocar unos libros,
café o entradas para ir al GO FIT.
El sorteo tardó un rato y sobre las 13:45
o 13:50 pusimos rumbo al instituto porque el último
timbre tocaba a las 14:15, así que por el camino
se veían caras cansadas y rojas de correr y
del calor. Al llegar al instituto todos fuimos rapidísimo
a por las mochilas porque todos queríamos ir
a casa para descansar. Pese al cansancio, todos nos
lo pasamos muy pero que muy bien.
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