Esta es una versión de un cuento tradicional cambiando el tipo de narrador. A partir del cuento en tercera persona se ha pasado a contar la historia desde la perspectiva de uno de los personajes en primera persona.

Blancanieves.

Llevaba mucho tiempo viviendo en aquella habitación con tan solo esa... bueno, digamos mujer y sí, era todo muy aburrido. Como cada mañana, me preguntó sobre quién era la más guapa del reino y, ¡cómo no!, yo haciéndole la pelota le dije que era ella. Supongo que esta vez fingí demasiado mal porque me lo volvió a preguntar amenazándome con un peine. No era muy intimidante, pero le dije la verdad. Creo que después dijo algo de llamar a un cazador y tal..., pero como siempre no le hice ningún caso. Durante los siguientes días estuvo viniendo un hombre varias veces. ¡Vaya! Se ve que sí tenía amigos.

No, no me caía bien. Ese día me preguntó otra vez lo de la chica esa. No me acuerdo de su nombre. Yo me seguía aburriendo hasta que un día, mientras gritaba sobre algo en plan "¡se ha escapado!", me dio finalmente con el peine y me partió. Realmente no sé cuánto tiempo pasó. Quizá un día o un año, o quizás tres meses y veintitrés días. No lo conté ni nada, pero alguien cogió uno de mis trozos y me reparó.

Ahora vivo en una casa pequeña con siete hombres bajitos que, desde que se enteraron de que hablo, me llaman Google.