La popularidad de la recogida de tapones está empezando a saturar el mercado. Particulares y asociaciones benéficas recogen tapones de plástico para venderlos. Se puede llegar a pagar entre 150 y 200 euros por una tonelada de estos.
Durante las pasadas navidades participé en el proyecto de ayudar a envolver regalos para un establecimiento de juguetes a cambio de una serie de donaciones aportadas por los clientes a una ONG.