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Red-acción
II Época / Nº32
Abril
2009
EN EXCLUSIVA
El secreto de la buena vida

Por José Luis Gutiérrez Real, alumno de 6º A de Primaria del colegio La Salle de Santander.

El concurso escolar 'El secreto de la buena vida' es una iniciativa puesta en marcha por el Plan Nacional sobre Drogas dirigida a centros educativos de Educación Primaria. Un alumno del colegio La Salle de Santander ha participado en la fase nacional.

José Luis Gutiérrez Real junto al cartel del concurso escolar.

Voy a contaros mi fin de semana en Madrid del 20 al 22 de febrero de 2009, por motivo de mi participación en la final nacional del concurso escolar 'El secreto de la buena vida', al que acudí representando a Cantabria junto a los ganadores de las otras autonomías.

La final se celebró la mañana del sábado 21 en el Ministerio de Sanidad, duró aproximadamente 45 minutos y, como ya sabéis, el concurso consiste en un juego de ordenador sobre hábitos saludables y nocivos. El ganador fue el representante de Andalucía, que era de Málaga.

A todos los participantes nos regalaron una enorme bolsa de deportes que contenía un chándal, ropa deportiva variada, zapatillas, un balón… y un bolígrafo para mi tutora Ana Rodríguez.

Nuestro reportero posa con el ex ministro de Sanidad, Bernat Soria..

El momento más emocionante de la mañana fue la recepción del ministro de Sanidad, Bernat Soria, que me pareció una persona muy amable y cercana que accedió gustoso a fotografiarse con todos nosotros, lo cual representa para mí un recuerdo imborrable.

Por la tarde, nos llevaron al Parque de Atracciones para soltar adrenalina y bien que lo consiguieron, pues lo pasamos "de miedo" montando en el tornado, la montaña rusa, la lanzadera… La verdad es que fue un fin de semana genial en el que además hice muy buenos amigos como el catalán Javier, el valenciano Sergio y la extremeña Carlota que eran muy simpáticos y contaban chistes buenísimos.

Por la noche tuvimos una cena conjunta de despedida, muy divertida, en la que incluso hubo "guerra de panes" y, tras dormir como un lirón, el domingo volví a casa con la mochila llena de buenos recuerdos.


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