Padres, compañeros de clase y madres, los principales agresores. En adolescentes la violencia de género es emergente y se da partir de los 12 años.

La violencia de género en los adolescentes es cada vez mayor.

Las cifras son alarmantes. Según el último 'Informe ANAR 2012: Violencia infantil en España' la violencia registrada contra menores aumentó un 13,6% respecto al año anterior. Un total de 1.778 niños y adolescentes han sido víctimas de violencia en nuestro país: maltrato físico (28,7%), violencia escolar (15,5%), maltrato psicológico (14,7%), abandono (12,4%), abuso sexual (11,5%), agresiones extra familiares (7,6%), violencia de género (6,9%), ciberacoso (1,5%), pornografía infantil (0,8) y maltrato institucional (0,4%).

El estudio destaca que el perfil de los agresores son fundamentalmente padres (22,5%), compañeros del centro escolar (18,4%), madres (15,5%), parejas o ex parejas del menor (8,2%) padrastro/madrastra (8%), o ambos padres (6,3%).

Según explicó Benjamín Ballesteros, director de programas de la Fundación ANAR, la violencia infantil se ha incrementado por el entorno en que viven los pequeños y porque la crisis económica también presiona a las familias a perder los nervios. Han detectado que el 43,5% de los menores atendidos han sufrido algún tipo de violencia durante más de un año, y un 46% de forma diaria. "Muchos padres utilizan el tortazo como pauta educativa, un grave error".

Ballesteros destaca que "la sociedad todavía no tiene conciencia de qué es el maltrato y el problema es que muchos padres lo utilizan como una pauta educativa, lo que es un grave error. Si quieren enseñar a sus hijos no deben emplear un tortazo o empujón, porque es violencia y el niño aprende que es el medio para conseguir un fin. Él también lo empleará. Hay pautas alternativas a la violencia".

También advierte que el maltrato psicológico en los menores tiene igualmente unas secuelas importantísimas "a veces irreversibles". Para evitarlo y que los padres sean más conscientes "yo les digo que piensen en los efectos que les produce si van a trabajar y su jefe les grita, les insulta... Seguro que les altera, sienten que su corazón se acelera, sienten angustia, enfado, rabia, ansias de venganza... Lo mismo ocurre cuando gritamos en la relación de poder padre e hijo".

La Fundación ANAR también ha detectado que la violencia de género en adolescentes es emergente en los últimos años. "Detectamos mujeres adolescentes víctimas de violencia de género por parte de sus parejas en edades más tempranas, incluso con 13 y 14 años —apunta Benjamín Ballesteros—. Solo el año pasado atendimos a 122 chicas. Queremos concienciar de este problema, puesto que el 67,4% de las menores atendidas no son conscientes de que están siendo víctimas de violencia de género".

Según Tomás Lagunas, director general de la Fundación ANAR, el año pasado atendieron 324.643 llamadas, un 67% más que en 2011. "Atendemos dos tipos de llamadas: unas de orientación, en las que resolvemos dudas, damos consejos, información..., y otras de orientación especial, que requieren una valoración psicológica y necesitan intervención o derivación al equipo de trabajadores sociales, abogados y psicólogos de la Fundación. Estos departamentos han realizado en 2012 un total de 13.106 derivaciones a recursos de ámbito jurídico y social; y han tenido que realizar 428 intervenciones urgentes por situaciones muy graves de riesgo para los niños".

Información original de la página:

http://www.abc.es/familia-padres-hijos/20130425/abci-trat-menores-201304251208.html

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