Desde 1964, para conmemorar
la muerte de Gandhi, se celebra el 30 de enero el
Día Escolar de la No Violencia y la Paz, reconocido
por la UNESCO en 1993.
El 30 de enero se recuerda la necesidad de la educación
para la tolerancia, la solidaridad, el respeto a
los derechos humanos, la no violencia y la paz.
Para ello los alumnos realizaron
un mural formado por un paraguas, en donde, a modo
de "metáfora", el paraguas "protegía"
las buenas noticias e imágenes (pro-paz )
de las malas (negativas y violentas).
También realizaron
gotas de lluvia con dibujos y palabras positivas
y las colgaron en los pasillos del centro para promover
la paz.