La
precocidad de la presencia de la mujer en armas en
España se remonta a la época de la conquista
romana. En la antigüedad, las mujeres celtas
participaban en las batallas y, de la misma forma,
lo hacían en la Península Ibérica.
También la época medieval está
llena de historias de mujeres guerreras, como el cantar
de gesta 'La doncella guerrera'. Esta historia también
tiene su parte de realidad.
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Mujeres soldado
durante unas prácticas. |
En el siglo XVII Catalina de Erauso ingresó
en el ejército español haciéndose
pasar por un hombre y participó en varias batallas.
Esta chica fue la primera mujer oficial del ejército
español.
También es el caso de Ana María de
Soto, que en el año 1793 entró en la
infantería de la marina española y fue
la primera mujer del mundo que llegó a formar
parte del cuerpo de élite, además de
alcanzar el grado de sargento.
En la guerra de la Independencia participaron muchas
mujeres, entre ellas Agustina de Aragón como
una mujer a destacar en este ámbito. También
fueron muchas mujeres las que participaron en la Guerra
Civil.
Ya de forma más oficial, en 1988 ingresaba
en las Fuerzas Armadas españolas la primera
mujer, Patricia Ortega, actualmente teniente coronel
del Cuerpo de Ingenieros, y destinada en la Dirección
General de Infraestructuras del Ministerio de Defensa.
Fue un hito, pues este hecho rompía uno de
los rasgos más tradicionales de la estructura
del Ejército.
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Patricia Ortega,
primera mujer teniente coronel de las Fuerzas
Armadas |
En la actualidad, en la categoría militar,
el empleo más alto es el de comandante. Las
mujeres militares no quieren tener privilegios, ni
ventajas. A pesar de todo no faltan episodios de acoso
y abuso por parte de la autoridad, aproximadamente
mil mujeres pidieron la baja por depresión.
Las mujeres pueden manejar tanques, aviones, helicópteros.
Existen sólo dos cuerpos militares en los que
las mujeres no han entrado, la escala de oficiales
de especialistas del Ejército de Tierra y la
escala superior de Música Militar, pero, pronto
lo conseguirán.
La presencia de la mujer en el ejército español
no es más que el reconocimiento de algo que
ocurrió desde hace muchos años. Las
mujeres españolas han podido demostrar que
sirven perfectamente para la guerra, incluso en tiempos
en que se luchaba espada contra espada.
Hoy en el ejército hay más de 14.500
mujeres. Ahora que estamos en crisis se han incorporado
más mujeres ya que a las jóvenes les
parece una salida laboral segura.
El ejercito español es más femenino
que nunca. "La carrera profesional es hoy igual
para hombres y mujeres, todos tienen las mismas tareas,
reciben la misma formación, disfrutan de los
mismos salarios", aseguraba la subsecretaria
de Defensa, María Victoria San José.
En España existe una igualdad entre hombres
y mujeres al enviarlos a zonas de conflicto que no
existe en otros países, como en Israel.
Israel es el único país en el cual
las mujeres tienen un sentido militar obligatorio.
Al cumplir los 18 años, la vida de las jóvenes
israelíes se interrumpe; en vez de pensar en
chicos, maquillaje, fiestas… se visten de verde
comprometiéndose con su país.
El Tsáhal (ejercito de defensa de Israel)
es el único del mundo que obliga por ley a
las mujeres a alistarse. Dos años en el ejercito
cambia mucho a una mujer de 18 años, y más
teniendo en cuenta todas la guerras y controvertidas
operaciones.
El 58% de las mujeres israelíes se alista
al ejercito, el resto evita ingresar a través
de excusas como, por ejemplo, que son religiosas ultraortodoxas,
con lo que cumplen el servicio al país en servicios
sociales. Las chicas que no se libran sirven a su
país en permanente conflicto, lo que las hace
vivir experiencias que pocas chicas en Europa se imaginan
(guardias en puestos de control en zonas palestinas,
rescates, operaciones de combate…) Detrás
del uniforme se esconden niñas recién
salidas de los institutos que lo último que
desean es la disciplina militar. Como consecuencia
cada vez son más las chicas que se declaran
religiosas.
El orgullo nacional o la defensa de la patria es
difícil de asimilar para chicas tan jóvenes,
aunque en Israel esto es parte de su educación.
El curso más exigente y duro es el de piloto,
que dura tres años y te cambia tanto el pensamiento
como el físico.
Entrar en un restaurante y ver chicas jóvenes
comiendo con un fusil al lado es una imagen cotidiana
en Israel. Muchas han muerto en estos años,
pero ellas no manifiestan tener miedo, insistiendo
en estar dispuestas a dar todo por su país.
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Mujeres soldados
de México. |
En países como Rusia, 70.000 mujeres trabajan
en el ejército. La mayoría ocupando
cargos administrativos y de papeleo, conexiones civiles,
transportes, mantenimiento, etc. Siempre en función
pacifista.
Unas 119 niñas estudian para ser militares.
En las universidades, además de la educación
profesional, se da entrenamiento militar básico
y se forma para entrar en las filas de reserva a los
jóvenes de los dos sexos. Los centros de enseñanza
secundaria dan lecciones de defensa tanto para niñas
como para niños.
Dentro del servicio efectivo se encuentran casi 18.000
mujeres entre suboficiales, oficiales y entre ellas
cuatro coroneles. Aunque están todas las ramas
representadas la mayoría pertenecen a grupos
de tierra y a las fuerzas aéreas.
Las mujeres son reconocidas como mejores francotiradores,
algunas de ellas se han convertido en legendarias.
Las relaciones entre hombres y mujeres son amigables,
a pesar de que existen actitudes de todo tipo.
Lo que es igual para ambos sexos es el entrenamiento
físico, siempre despiadado. Ellas mismas no
han elegido este trabajo como algo que les guste,
sino como una forma de ayudar a sus familias y obtener
empleo.
Permitir que una mujer pueda alcanzar el más
alto rango en las fuerzas armadas es el paso más
significativo que ha dado México en 30 años.
A pesar de ser una de las instituciones más
reticentes a realizar cambios, México ha abierto
sus puertas para que por primera vez llegue a alcanzar
el rango de general de división una mujer,
el más alto en las Fuerzas Armadas.
Se ampliaron las opciones educativas para las mujeres
garantizando así la igualdad de oportunidades
de género, por lo que desde 2007 pueden estudiar
para pilotos aviadores e ingenieros constructores.
Incluso tendrán acceso al Heroico Colegio Militar,
considerado la cuna de los militares mexicanos.
Desde 1938, las mujeres se incorporan a la vida militar
a través de la Escuela Militar de Enfermeras.
En el año 73 entran ya en la Escuela Médico
Militar y en 1976 se crea una Escuela de Odontología
que se abre para las mujeres. De 66 mujeres se graduaron
48.
A pesar de que las fuerzas armadas están integradas
todavía mayormente por hombres, en 2012 quieren
que se llegue a la cifra de 920 mujeres en el ejército.
A pesar de los inconvenientes que la mujer ha ido
encontrando a lo largo de la historia para que su
papel en diferentes profesiones catalogadas hasta
el momento como estrictamente masculinas sea reconocido,
dentro del ámbito militar ha aumentado considerablemente
la presencia de la mujer en el ejército.

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