Recientemente el Tribunal de Justicia de la UE se ha pronunciado sobre la ilegalidad del canon digital impuesto por la SGAE sobre aparatos de reproducción como CDs, DVDs, MP3 y otros. La sentencia dictamina que la norma que regula la imposición de esta tasa no respeta el concepto de compensación equitativa que se define en la Directiva Europea del 2001 relativa a los derechos de autor, determinando además que altera el justo equilibrio entre los afectados, ya que impone cargas a los fabricantes y compradores profesionales.

Viñeta sobre el canon impuesto por la SGAE.

Esta sentencia reconoce el derecho de los países miembros de la Unión Europea a recaudar dinero para compensar a los autores pero, sin embargo, considera injusta esta norma ya que se hace de una forma indiscriminada. Así, admite que al usuario o consumidor que adquiere cualquier aparato de los relacionados podrá imponérsele esa tasa, pero no al fabricante. Pero, ¿qué es exactamente el canon por copia privada? Es una tasa que se aplica a determinados medios de grabación y con la recaudación de la misma se paga a los asociados a la Sociedad General de Autores de España, SGAE.

En la actualidad este canon se cobra en nuestro país a los fabricantes e importadores de equipos que sirven para la grabación de obras protegidas por la Ley de Propiedad Intelectual, y repercute, lógicamente, en el precio final del producto, es decir, finalmente lo paga el usuario que adquiere el producto. Entre los contrarios a este canon se argumenta que el mismo implicará el cierre de empresas. En el año 2006 cerró en España la última empresa dedicada a la producción de CDs, BOCSA, despidiendo a 30 trabajadores. Asimismo afectaría a ciertos músicos, cuatro millones según algunas fuentes, que venden su música bajo el licencia copyleft.

Frontalmente a este canon se sitúa la asociación de consumidores FACUA. En contra de este canon cabe destacar a la Comisión Asesora del Ministerio de Industria que considera una carga económica y fiscal injusta e indiscriminada, implicando una dificultad para el acceso a este producto por los usuarios. Hay otros que desde el punto de vista legal lo consideran como una multa preventiva, ya que se grava a todo el mundo, aunque se haga una copia para uso privado y no para su difusión o posible beneficio.

Este canon es una de las fuentes de financiación de la SGAE. En el año 2003 el Gobierno de Aznar amplió el canon digital a los CDs y DVDs y en el 2006 Zapatero hizo lo propio con las grabadoras de MP3, MP4 y teléfonos capaces de almacenar o reproducir música. Las consecuencias de esta sentencia pueden ser demoledoras para la SGAE, ya que las administraciones públicas que hasta la fecha debieron satisfacer este canon ya han manifestado que están dispuestas a pedir la devolución de las cantidades cobradas hasta la fecha de forma ilegal. Se calcula que estas cantidades podrían superar los mil millones de euros. Los beneficiados hasta la fecha por estas cantidades ya se han apresurado a manifestar que no devolverán estas cantidades ya que la sentencia no tiene carácter retroactivo.
Por su parte la ministra de Cultura, Ángeles Gonzalez-Sinde, ha declarado que el Gobierno buscará una solución alternativa para compensar las consecuencias negativas de esta sentencia, negociando con las partes involucradas en este conflicto.