Alicia es la actual cocinera jefe de nuestro colegio. Sigue trabajando con la misma intensidad del primer día pese a llevar trabajando en este colegio más de dieciocho años. En tanto tiempo ha vivido múltiples experiencias, unas buenas y otras malas, lo cual ha forjado el carácter de esta dura pero a la vez tan buena persona. En esta entrevista Alicia, ayudada por sus compañeras, nos describirá su día a día en las cocinas de nuestro colegio.

Nuestros reporteros posan con Alicia.

Pregunta.- ¿Que prima más a la hora de realizar el menú, la salud o los gustos de los niños?
Respuesta.- Principalmente nos preocupamos más por la salud, aunque siempre hay que tratar de conseguirla. Alguna vez sí que preparamos comidas para que los niños disfruten con ellas.

P.- ¿Cómo te pueden afectar las críticas de los chavales sobre tu comida?
R.- Siempre te afectan. Una siempre lo hace lo mejor que puede y cuando los niños te dicen que no les gusta te sientes ofendida.

P.- ¿Cuál es el plato que mejor te sale y el que más disfrutas haciendo?
R.- La paella, creo que es de los platos que mejor nos quedan a todas. Además, no es muy complicado de cocinar. También nos queda bien el pollo, pero el mejor es la paella.

P.- ¿Preparas la comida con la misma intención y esfuerzo aunque tú no la comas?
R.- Si, por supuesto. Soy muy profesional en mi trabajo. Siempre pongo todo mi empeño en que la comida me quede bien, aunque generalmente sí que la comemos.

P.- ¿Cuál es el plato que menos te gusta cocinar?
R.- Las alubias. Pese a que no nos guste prepararlas, creo que nos quedan muy buenas.

P.- ¿Qué tal se comportan los chavales durante las comidas? ¿Y los profesores?
R.- Los niños son muy mal educados, gritan mucho, lo que no facilita tu trabajo. En cambio los profesores es muy diferente, se comportan muy bien y aprecian nuestra comida.

P.- ¿Cómo decidiste dedicarte a esto?
R.- No lo decidí, llegue aquí buscando trabajo y me dieron un puesto de ayudante en la cocina. Al año siguiente me ascendieron a cocinera jefe.

P.- ¿Te fue fácil encontrar trabajo?, suponemos que más que ahora ¿no?
R.- Sí, fue fácil. Antes no había tantos problemas de paro como ahora.

P.- Tras todos los años que llevas trabajando en el colegio, ¿qué opinas sobre él?
R.- Me parece un buen colegio. Los profesores son buenos y creo que hacen bien su trabajo. Yo estoy contenta aquí.

P.- ¿Por qué eres tan estricta con los chavales?
R.- No soy estricta, simplemente me gusta el orden y si no impones un poco de dureza te dominan y no hay quién pueda con ellos. Por eso debes de ser algo dura.

P.- ¿Crees que realmente se valora tu esfuerzo?
R.- No, casi nunca se valora. Los únicos que lo hacen suelen ser los profesores, los niños nunca lo hacen.

P.- ¿Se desaprovecha mucha comida?
R.- Generalmente no, suele acabarse casi toda. En muchas ocasiones, aunque no os lo creáis, incluso nos falta comida.

P.- Si tuvieses la ocasión de trabajar junto con un famoso cocinero, ¿con quién lo harías?
R.- Sin duda con Ferrán Adriá. Es un maestro en el arte de la cocina, me encanta como hace los platos y sobre todo su ingenio al hacerlos.

P.- ¿Cómo es tu día a día en el colegio?
R.- Es muy complicado. Llego a las nueve y lo preparo todo para hacer la comida. Lo más complicado es cuando llegan los niños a comer, porque se monta un revuelo impresionante. A las tres o así se van todos y comemos nosotras; luego recogemos y lavamos todo y a las 16:30 o 17:00 nos vamos a casa.

P.- ¿Es gratificante tu trabajo?
R.- A veces sí, pero otras muchas me hace llegar enfadada a casa y eso no me gusta, pero eso ocurre pocas veces.

P.- ¿Te hubiese gustado tener otro trabajo?
R.- Sí, me hubiese gustado poder trabajar sentada todo el día (risas). Este trabajo es muy sacrificado, pero me gusta.

P.- ¿Crees que las nuevas generaciones son menos educadas que las anteriores?
R.- Sí, por supuesto que sí. Las generaciones actuales están muy maleducadas, por eso nosotras tratamos de imponer disciplina, aunque eso se debe aprender en cada casa.

P.- ¿Cuántos años llevas en la cocina? ¿Y en el colegio?
R.- Llevo 18 años, todos ellos aquí, además siempre muy a gusto.

P.- ¿Te gustaría acabar tus días de trabajo aquí?
R.- Por supuesto que sí, siempre he estado muy contenta y a gusto aquí por lo que me haría muchísima ilusión poder jubilarme aquí.