Un grupo de amigos con sus problemas. Alcoholismo, malos tratos, muertes de familiares que ahogan a los protagonistas de esta 'Noche de viernes'. Una búsqueda de libertad mal entendida en esta obra de literatura juvenil.

Título: 'Noche de viernes' Autora: Jordi Sierra i Fabra. Editorial: Alfaguara Año: 2004

Los protagonistas de la novela son cinco chicos: Serafín, José Luis, Mariano, Ismael y Lázaro. Cada uno tiene familia, problemas y preocupaciones distintas.
A Ismael le ha dejado la novia porque se va a realizar el servicio militar durante un año. Tiene un hermano homosexual.
Lázaro ha crecido sin padre, su madre trabaja en un taller y tiene una hermana de diez años.
A Serafín le gusta tocar la guitarra, repite 3º de BUP. Quiere a toda costa echarse novia. Hace años se le murió un hermano y a partir de ahí todo cambió en su casa.
El padre de José Luís es alcohólico y de pequeño le pegaba, tiene una hermana "ligera de cascos" y su madre trabaja de noche en un restaurante.
Los padres de Mariano están separados. Su madre aún no lo ha superado, aunque sale con un señor. Su padre ha rehecho su vida, ahora tiene una novia más joven que él y está embarazada. Tiene una posición económica desahogada, mejor que sus amigos y es el único que estudia en la universidad, hace la carrera de Económicas. También es el único que viste diferente a los demás, los otros llevan ropas negras, cazadoras de cuero y pelo largo. Sin embargo Mariano viste con camisas, tiene un pendiente y el pelo corto.

Lázaro y José Luis son los más violentos y los que más drogas consumen. Toda la semana esperan impacientes la llegada del viernes. El último viernes se prepararon como de costumbre para salir de fiesta. De bar en bar, sin parar de beber, poco a poco se fueron encontrando todos. Lázaro deseaba conseguir "hierba" para fumar.

Fueron a una fiesta y tuvieron una pelea con unos skinheads y a Ismael le pegaron un puñetazo en el ojo. Echaron a correr hasta la casa de Serafín. Al entrar en el portal, para vergüenza de Serafín, se encontraron con su padre en condiciones lamentables, borracho, orinando, vomitando e inconsciente. Le subieron a casa y curaron el ojo a Ismael. Lázaro, cada vez más rabioso, insistía en conseguir algo para fumar.

Fueron a la casa de un marroquí, Mohamed, al que no conocían de nada, pero daban por hecho que traficaba, sencillamente por su nacionalidad. Éste insistía una y otra vez que él no tenía droga, pero no le hicieron caso.

Entraron a la fuerza en su casa, una chabola sin luz. Serafín se abalanza sobre él y en el forcejeo le clava un cuchillo. Lázaro prende fuego accidentalmente al colchón en que dormía Mohamed y la chabola se incendia rápidamente. Todos deciden huir y dejar dentro el cadáver, para destruir pruebas.

Al día siguiente todos estaban mal y arrepentidos. Al cabo de un tiempo la policía descubre que han sido los causantes de la muerte de Mohamed, pero el narrador no aporta ningún tipo de detalles, ni lo que sucederá con sus vidas, sólo que el caso estaba cerrado.