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                            de varios años demandando soluciones, la Consejería 
                            de Educación invertirá 1,2 millones 
                            de euros en la rehabilitacion y el nuevo edificio. 
                             
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                                  El deplorable estado de la pista del recreo 
                                    muestra en qué condiciones hacen los 
                                    niños las clases de educación 
                                    física. (PGB) |   La Consejería de Educación 
                            invertirá 1,2 millones de euros en las obras 
                            de ampliación del colegio público Concepción 
                            Arenal, en Potes. Las obras contemplan la construcción 
                            de un nuevo edificio, con ocho aulas, y una superficie 
                            construida superior a 666 metros cuadrados. El Boletín 
                            Oficial de Cantabria (BOC) publica estos días 
                            el concurso con el fin de seleccionar a un contratista. Fuentes de la Consejería informaron que el 
                            edificio anexo tendrá dos plantas de algo más 
                            de 300 metros cuadrados útiles cada una. En 
                            cada planta habrá cuatro aulas, una de unos 
                            50 metros cuadrados y las otras de entre 65 y 70 metros. La superficie total del nuevo espacio educativo una 
                            vez finalizadas las obras tendrá más 
                            de 3.090 metros cuadrados, de los cuales 325 irán 
                            destinados a Educación Infantil. En la actualidad, 
                            esta sección se encuentra en otro punto de 
                            la villa debido a la falta de espacio que el edificio 
                            existente viene demandando desde hace tiempo. No hay 
                            que olvidar que el instituto Jesús de Monasterio, 
                            que en la actualidad se encuentra ya en proceso de 
                            ampliación, presentaba la misma problemática 
                            e invade cuatro aulas del colegio para alojar a parte 
                            de sus alumnos. Además de las obras del nuevo edificio, que 
                            se construirá junto al antiguo, se rehabilitará 
                            el ya existente y se mejorarán sus accesos 
                            y un patio cubierto de 60 metros cuadrados. Los padres 
                            y las madres de los alumnos han venido realizando 
                            reiteradas quejas desde hace años, por no tener 
                            unas instalaciones adecuadas, así como una 
                            situación de vulnerabilidad para los escolares 
                            dadas las pésimas condiciones en que se encuentran 
                            tanto el recinto escolar como su entorno. Larga demanda El colectivo de padres lleva años demandando 
                            una solución a las paupérrimas condiciones 
                            en que los pequeños tienen que asistir diariamente 
                            a sus clases.  El edificio muestra en sí mismo un evidente 
                            estado de deterioro que se agrava al adentrarse en 
                            su interior. Ocurre lo mismo con los patios en los 
                            que los escolares juegan y se esparcen en sus ratos 
                            de recreo ya que a la decrepitud que ofrecen a la 
                            vista las inmediaciones se suman todos los vertidos 
                            y basuras que con frecuencia se encuentran los pequeños, 
                            a la vuelta del fin de semana, sin que se pueda hacer 
                            nada al respecto ya que cualquiera puede acceder al 
                            recinto. De hecho ya se han dado varios actos de vandalismo 
                            dentro de las aulas de los más pequeños. 
                           Un numeroso grupo de padres y madres de los 350 alumnos 
                            de que consta el colegio Concepción Arenal 
                            están iniciando una queja conjunta reclamando 
                            seguridad en el centro. Por su parte, Alfonso Gutiérrez, alcalde de 
                            Potes, considera que "esta reforma es de todo 
                            punto necesaria porque los niños no pueden 
                            estar diseminados en dos escuelas, se trata de unificarlos 
                            a todos en un mismo recinto y que éste sea 
                            seguro. Liébana necesita una concentración 
                            escolar unificada para todos sus niños". PILAR G.BAHAMONDE   
                             
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