En invierno los animales lo tienen más difícil para conseguir alimentos. Es el caso de la protagonista de este cuento, una ardilla que recurre a la solidaridad para poder sobrevivir.

Compartiendo la comida para el invierno.

El invierno ya llegaba. Cada vez hacía más frío y nieve. La señora ardilla estaba preocupada porque el año se le había pasado muy rápido cuidando a sus crías; además no tenía comida.

Fue por el bosque buscando ayuda. Primero la ayudaron el señor y la señora reno pero sólo tenían hierbas y hojas, así que fue a ver al búho, pero él tenia ratones.
Y así con muchos animales.

Un día llegaron al bosque una familia de ardillas con mucha comida. Entonces nuestra protagonista pidió ayuda, y como las nuevas ardillas eran muy amables le dieron comida para todo el invierno.
Por fin tenía el alimento que necesitaba.