Nº4. Abril 1998
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... Ciudad, mi pueblo, mi barrio... El
entorno geográfico, social y humano de cada centro visto
por sus alumnos. Reportajes cálidos y coloristas para
conocer el medio en el que cada escuela o instituto desarrolla
su labor educativa.
Texto e imágenes que reflejan el extramuros de las aulas;
lo bueno, lo regular o lo malo, que de todo hay, que rodea al
mundo escolar.
Visiones apasionadas de un entorno que, aunque cotidiano, no
siempre se aprecia en toda su magnitud a primera vista. Para
descubrir y descubrirnos una ciudad, un pueblo, un barrio...
En este número conoceremos: El transporte público
de la capital cántabra, su curiosa historia, su situación
actual y la opinión de uno de sus trabajadores.
Reportajes:
El Transporte Público en Santander
Transporte Urbano en Santander
Zulema Gómez Sierra y Cristina
del Río Gómez 3ºC del IES. "Santa Clara
de Santander.
Los medios de transporte del S.M.T.U. (Servicio municipal
de Transportes Urbanos) de Santander, poseen actualmente los
servicios de transporte público más avanzados.
Podremos ir viendo detalladamente a través de este amplio
reportaje realizado por dos alumnas del Santa Clara, la evolución
de dichos transportes (autobús), en la capital cántabra.
El primer transporte de viajeros en Santander
En 1875 comienza el servicio público del "Ferrocarril
de El Sardinero", conocido por la población por
el nombre de Tranvía de Gandarillas, obteniendo
el nombre de su promotor. Este fue considerado históricamente
el primer transporte de pasajeros establecido en la ciudad de
Santander.
El servicio se inició con mulas. En el trabajo de remolque
del primer transporte urbano de Santander se utilizaban 32 mulas
por la vía de un sólo carril para la ida y vuelta,
a lo largo de más de 4 kilómetros, mientras que
ahora, los autobuses recorren nuestra ciudad incontables veces,
y de una forma mucho más cómoda y rápida.
La prensa hizo entonces grandes elogios de los tranvías
movidos por los cuadrúpedos. El tranvía se puso
de moda y la gente lo utilizaba especialmente para ir a la playa.
Dos años después, y con la llegada de las locomotoras,
llamadas "Santander" y "Sardinero",
quedó anulado completamente el remolque por medio de mulas.
Transportes Urbanos, la época moderna
Al llegar los años 60, los transportes urbanos de la
capital de Cantabria sufre una gran transformación.
Se trata del cambio en la marcha de las empresas de autobuses
y de las relaciones laborales, sociales, o de trato con el público.
En fin, era la llegada de una nueva época, y con ella,
la necesidad de ampliar y mejorar los servicios. Por eso, se
acuerda dar mejor servicio durante el verano, el servicio nocturno
se amplía y se autoriza la salida de un autobús
para el traslado de estudiantes hasta la Universidad, lo que
supuso cuatro viajes diarios con un total de veinticuatro kilómetros
de recorrido y una recaudación de 160 ptas. diarias. Mientras,
se acuerda establecer nuevas tarifas y la posibilidad de establecer
pases económicos
Se acuerda asimismo la provisión de plazas de cobradores,
dos con carácter fijo y seis con carácter eventual,
según las necesidades del servicio. Se ponen en marcha
cinco nuevos autobuses.
Un hecho curioso: En 1960 nace un niño en un
trolebús y la alcaldía gratificó a los padres
con mil pesetas y el Consejo de Administración aprobó
la concesión de un pase vitalicio al recién nacido.
En marzo de 1961 cambia el nombre del Servicio Urbano de Transportes
que pasa a denominarse " Servicio Municipalizado de Transportes
Urbanos " abandonando el antiguo nombre de " Empresa
municipal de transportes urbanos.
En 1963 se acuerda elevar la edad de 35 a 45 años para
ser admitidas las solicitudes para cubrir plazas de conductores.
En esta época Santander se encuentra en un periodo
de expansión en todos los niveles, y por ello los transportes
no pueden ser menos, se aprueban nuevos recorridos y se estudia
prolongar líneas existentes (hasta la Universidad Menéndez
Pelayo) y se suprimen casetas de cobro de billetes en Valdecilla,
Perines y Puertochico
En 1966 se aprueba la adquisición de dos autobuses PEGASO
5022, se sustituyen los trolebuses por autobuses en la línea
a Peñacastillo. Además se aprueba la elevación
de la tarifa hasta dos pesetas, con entrada en vigor el uno de
enero de 1967.
Las tarifas suben a 100 ptas. en junio de 1970, acordándose
al tiempo la ampliación de la línea del Barrio
Pesquero hasta San Martín. En 1971 se acuerda dar servicio
a la Albericia y Complejo Deportivo, y comienza la implantación
de la figura del conductor-cobrador, por lo que se aprueban se
adquieran máquina expendedoras de billetes.
Al año siguiente se cree conveniente retirar paulatinamente
las columnas del tendido de trolebuses. Los postes del antiguo
tendido son 135, que serán quitados de la vía pública
por Don Eleuterio López Alonso, a razón de 960
ptas. cada uno.
En 1973 se mejoran las líneas de transporte estableciendo
un servicio con Mercasantander, y se solicita más crédito
destinado a la adquisición de autobuses articulados.
Es en 1974 cuando se implantan nuevas tarifas, 5 ptas. para billetes
ordinarios y 7 ptas. para microbús.
En 1975 se crea la línea de Cazoña, se cumplen
25 años de la creación de la Empresa Municipalizada
de Transportes y se amplía el servicio nocturno durante
los meses de julio y agosto. En 1979 se solicita que los billetes
alcancen un precio de 15 ptas. como tarifa única y la
puesta en circulación de tarjetas-abono de 22 viajes al
precio de 200 ptas.
Llega el bono-bus a Santander
En el año 1981 como sucede en otras muchas empresas,
los empleados de transportes realizan huelga intermitente.
Se acuerda asimismo solicitar la imposición de sanciones
a las personas que suban al autobús sin billete, estableciéndose
en 250 pesetas.
Ante la llegada de las canceladoras se interesa la implantación,
del bono-bus. Tabacalera está dispuesta a la venta, previa
comisión del 6% y con contrato por seis años.
En 1983, cuando la ciudad de Santander ya ha sufrido una notable
transformación, se acuerda la creación de una línea
de circunvalación que pase por la nueva Avenida de los
Castros, se establece para tener derecho a pase de jubilados
los ingresos anuales deben ser inferiores a 400.000 pesetas,
aprobándose las nuevas tarifas, que quedan establecidas
de la siguiente manera: billete único de 25 ptas.; bono-bus,
10 viajes, 200 ptas.; efectos (bultos) 15 ptas.
Se necesitan para el servicio nuevos conductores-cobradores y
así, en 1984, para cubrir 25 plazas se presentan 159 solicitantes.
En septiembre el Consejo de Administración de Transportes
Urbanos de Santander acuerda proponer la revisión de tarifas,
debiendo quedar el billete en 30 ptas., el bono-bus en 240, y
los efectos en 15. Al año siguiente, se acuerdan las nuevas
tarifas, que empezarán a regir a partir del primero de
enero de 1986 y que serán, 35 pesetas para el billete
único y 280 para el bono-bus. Actualmente los precios
del bono-bus son de 550 pesetas, y el billete único cuesta
alrededor de 100 ptas.
Entrevista a un trabajador del S.M.T.U.
P: -¿Qué nos puedes aportar sobre tu
empresa?.
R: - Bueno yo no puedo decir muchas cosas pero te puedo
contar algo sobre ella actualmente.
Está situada desde siempre en Cajo y posee aproximadamente
55 autobuses y 210 empleados (sin contar a los limpiadores/as,
a los del mantenimiento de los autobuses, etc.) como conductores.
Es una empresa que pertenece al Ayuntamiento de Santander.
Cada año se va subiendo el precio del billete, hasta llegar
a costar ahora mismo 100 ptas.
Todos tenemos nuestros propios compañeros para poder relevarnos,
uno hace el turno de día y el otro el de noche, rotándonos
todos por las diferentes líneas de autobuses. El horario
de estos, varia según la época del año,
si es verano o invierno. Hoy en día esta empresa posee
unos autobuses muy modernos y comodísimos (que eso es
lo que importa).
P: -¿ Puedes contarnos algo sobre el gamberrismo
qué existe en los autobuses?
R: -Volvemos al tema de siempre. Los gamberros están
en todos los sitios, pero en los autobuses hay bastantes. Los
adolescentes se suben al autobús y empiezan a destruir
y a quemar, pintar los asientos, etc. No saben respetar lo que
no es suyo y fíjate si son ignorantes que destruyen lo
nuevo y lo que no es de ellos.
Los autobuses cuestan mucho dinero y al Ayuntamiento no tiene
porqué pagar los desperfectos.
Yo nunca les digo nada, porque no te hacen caso, así que
qué voy a opinar sobre este tema (no hay solución).
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