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La radio desde dentro
Chayanne en concierto

La radio desde dentro
Por Laura Gutiérrez Fernández, alumna de 4ºB de ESO del Colegio La Salle de Santander.

Un grupo de alumnos de 4º de Secundaria del Colegio La Salle ha logrado pasar a la segunda fase del concurso Jóvenes al loro que organiza Radio Nacional de España. Laura, una de las participantes en las pruebas, nos relata cómo ha sido la experiencia.

El equipo de La Salle, con su profesor, Javier Abad.

Ya lo conocíamos con anterioridad; ya habíamos oído hablar de él. El nombre, Jóvenes al loro no nos era indiferente, pues conocíamos este concurso de RNE desde que comenzó, hace dos años, porque compañeros de nuestro colegio habían participado, obteniendo buenos resultados.

Bueno, igual decir que lo conocíamos bien es demasiado... Mejor, habíamos oído comentarios sobre el tema. Incluso en más de una ocasión algunos de nosotros asistimos en el salón de actos del Cole a las distintas etapas de la eliminatoria, apoyando al equipo... Pero conocerlo, conocerlo del todo, no lo conocíamos. Sólo lo hemos conocido al meternos de lleno y ser nosotros los protagonistas.

Todo comenzó cuando a principios de este curso se nos pidió escribir en un papel cuatro posibles candidatos, de entre nuestros compañeros, para que nos representaran en el concurso. Los más votados entre las cuatro clases de 4º ESO serían los concursantes. A los pocos días nos dijeron los resultados... Los participantes seríamos María, Patricia, Ángel, Alberto, Isabel, Agustín, Rebeca, Óscar, Hugo y Laura.

Yo no me podía creer que me hubieran elegido a mí. La verdad es que todos teníamos muchas ganas de participar (ninguno de los elegidos renunció al puesto...). Pero a la vez también teníamos algo de miedo, pues el hecho de estar en el equipo conlleva una responsabilidad añadida: tener que estudiar todo lo que te toque, con la presión de no querer defraudar ni a los compañeros que han confiado en ti, ni al equipo del año anterior que había quedado ganador.

Preparados, antes de comenzar... Esto de la radio es un mundo.

Lo primero que conocimos fue la dinámica del concurso: te van haciendo preguntas de actualidad con repuesta corta, una a cada equipo. Cada pregunta acertada vale 2 puntos y los rebotes, uno. Y para contestar sólo disponemos de 10 segundos.

Nos dijeron que la eliminatoria sería el 25 de octubre, por lo que, a partir del viernes de la semana anterior tuvimos que empezar a estudiar (y digo estudiar) los periódicos. Lo primero que hicimos, dirigidos y ayudados por nuestro profesor, Javier Abad, fue repartirnos la materia en secciones: cultura, deporte, nacional e internacional.

El primer día que nos reunimos estábamos un poco perdidos. No sabíamos ni cómo resumir las noticias ni cómo estudiarlas. Menos mal que esto duró poco, pues no tardamos en cogerle el truco a eso de manejar un montón de periódicos cada tarde (en total tuvimos que trabajar con ¡35 periódicos!).

A medida que pasaban los días nos fuimos poniendo más nerviosos, pues -a pesar de dedicar cada vez más horas- nos parecía que ni todo el tiempo del mundo nos sería suficiente para acabar las tareas. Nos reunimos todas las tardes de esa semana para resumir y estudiar. Y, al contrario de lo que desde fuera pudiera parecer, allí nos lo pasamos muy bien porque nos llevamos genial entre nosotros, amenizando el estudio con bromas y tonterías.
Por fin llegó el viernes. Como flanes nos subimos al escenario, nos sentamos y nos pusimos los cascos. Estábamos muy nerviosos. Por suerte, vino bastante gente a animarnos y eso nos ayudó. En las primeras preguntas casi ni respirábamos, pero a medida que fuimos acertando preguntas y acumulando puntos, nos fuimos soltando y cogiendo confianza.

En realidad, no participamos los 10 componentes a la vez, pues las normas dicen que tiene que haber dos suplentes que, por cierto, no quedaron ociosos, sino que todos trabajamos lo mismo. Para decidir quién sería suplente, el profesor nos preguntó a cada uno, aunque la decisión final quedó en sus manos, el jueves por la noche.

Esta primera eliminatoria la ganamos 24 a 6 frente al colegio MM. Dominicas de León. Y, ¡cómo no!, esa noche salimos todos juntos para celebrarlo.

Ahora mismo nos encontramos en "época de ignorancia" (aunque sería mejor llamarla de descanso), porque hasta el mes de febrero no terminará la primera fase y no sabemos cuándo volveremos a competir. Lo cierto es que tenemos ganas de repetir, porque nos lo pasamos muy bien.

Para qué mentir: por supuesto que nos gustaría ganar, pero eso no es el propósito principal. Si perdemos no pasa nada; lo importante, aunque ya sé que puede parecer un tópico, es participar. Además, hay que tener en cuenta que tenemos el listón muy alto...

Ya os contaremos más cosas en otra ocasión. Un saludo.