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Reportajes: El Medievo regresa a Santillana del
Mar
El primer fin de semana de marzo la villa de Santillana del Mar regresó al medievo. En sus calles caballeros, juglares, princesas, comerciantes, ofreciendo productos típicos de la región, músicos, poniendo música en las calles, malabaristas... Todos ellos formaron parte de un espectáculo que nos cuentan dos alumnas del Manuel Gutiérrez Aragón, un instituto cercano a la villa de las tres mentiras. La villa de Santillana regresa a sus orígenes gracias a la colaboración
del Ayuntamiento y de los mercaderes llegados desde todos los puntos. La Torre de Don Borja y su plaza, uno de los lugares en el que en el pasado se celebraban mercadillos medievales La participación y entrega es tal que diversos comerciantes y
artesanos del lugar sacan sus productos a las calles y se visten con los
ropajes del medievo. Dentro de nuestra gastronomía nos podíamos encontrar diversos productos típicos como pueden ser: chocolates, dulces, bollos preñaos (pan relleno de chorizo, atún...), orujo de Potes (destilado a la vieja usanza), sobaos pasiegos y quesada. Por otra parte, se podían encontrar puestos medievales en los que servían numerosas clases de té e infusiones turcas procedentes de diferentes regiones. En definitiva, se ha valorado de forma muy positiva la experiencia y ya se apunta a que de cara al próximo año se repita.
La mitología vuelve a los pueblos
de Cantabria En los pasados carnavales del 8 al 11 de febrero pudimos observar cómo la mitología cántabra vuelve a los corazones de la gente. Diversos pueblos de Cantabria se volcaron con los temas mitológicos, eligiendo varios de sus personajes para la construcción de disfraces. Así pudimos observar desde el malvado Ojáncano hasta la bondadosa Anjana o el travieso Trenti. Niños y mayores disfrutaron de estos festivos días metidos en un mundo de magias y mitos. Pueblos como Comillas, Caviedes o Cabezón de la Sal, se volcaron con la mitología cántabra para dar a sus carnavales un ambiente mágico. Dentro de las diversas fiestas, la mitología no sólo triunfa en los carnavales sino que podemos ver su aparición en "El Día de la Montaña" de Cabezón de la Sal y diversas obras infantiles en la fiesta de San Justo y Pastor en Caviedes. Niños y mayores eligen sus personajes dependiendo en su mayoría de la personalidad del ser mitológico en el que se ven reflejados. El Trenti es uno de los más elegidos por los niños
ya que simboliza la fuerza masculina del bosque, es travieso y le gusta
llamar a las mozas haciéndoles gestos obscenos mientras les tiran
avellanas y piedrecillas. Del mismo modo observamos que los padres o chicos de elevada edad se inclinan más por el Ojáncano, ser brutal y primitivo de gran fuerza de un solo ojo por el cual desprende fuego. Al enfurecerse provoca grandes aludes en los valles. En la actualidad, la mitología cántabra también se "apodera" de los empresarios, influyéndoles así a la hora de poner el nombre a su establecimiento, dentro de los cuales nos podemos encontrar el Jándalu, tienda de cuero artesano en Cabezón de la Sal, Trenti librería y establecimiento de dulces y Anjana comercio de complementos también en Cabezón. Por todo ello, la mitología cántabra presenta un amplio
abanico de posibilidades para su utilización; no sólo son
mitos y leyendas que han pasado a la historia sino que hoy en día
también son conocidos debido a su uso comercial.
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