Trabajos:
Relatos
En busca del verdadero tesoro (Parte
I ) Por Elsa
La Mansión de los horrores
(Cap I)
Poemas
Varios poemas Por
Luna
En busca del verdadero tesoro I
Por Elsa Velasco Valdés, alumna de 2º ESO
del IES José Hierro de San Vicente de la Barquera.
Había una vez en Sidney (Australia) una chica llamada Alison.
Alison, tenía doce años y vivía en el hotel
de sus padres, Enma y Samuel.
Samuel nació en Portugal, era de una familia muy pobre; pero
cuando logró reunir suficiente dinero para venirse a estudiar a Australia,
todo le fue bien.
Enma nació en Norteamérica, en Chicago para ser más
exactos. A diferencia de su marido Samuel, era de una familia bastante
rica, porque trabajaba en la industria siderúrgica.
Alison iba al instituto, estudiaba y trabajaba mucho. Estaba en
el tercer trimestre y la nota más baja que había sacado en
un examen había sido un siete. La asignatura favorita de Alison
era Geografía, y nunca sacó en dicha asignatura menos de un
nueve.
Alison era muy sociable y su mejor amigo se llamaba Tom,
un muchacho que nació en Nueva Zelanda. Tom era un chico que
sacaba en sus notas suficientes y bienes. La asignatura favorita de Tom
era también Geografía, se le daba bastante bien. Los dos chicos
soñaban con encontrar una isla que no apareciera en el mapa. Ellos
pensaban que encontrarían un tesoro; "Mucho dinero".
Una tarde en la que Tom y Alison se juntaron:
- ¡ Oye Tom¡ tengo que contarte algo alucinante, ven.-
Le decía Alison desde la puerta de su casa a Tom
-¿Qué te pasa? ¿Estás loca?- Decía
Tom mientras salía de su casa-
- Tengo una tía en Ecuador, mis padres me dejan ir a visitarla
estas vacaciones.
-¡Qué guay¡ ¿Me traerás algo?
-Lo más chulo es que me dejan ir en un crucero yo sola. Bueno,
con una camarera amiga de mis padres que estará encantada de ayudarme.¿
Te quieres venir conmigo?
-¿De verdad?, no me lo creo.-Dijo Tom con los ojos
como platos- pero mis padres no me dejarán ir-dijo
desilusionado.
-Ah, tú por eso no te preocupes, mi madre va a ir a tu casa para
ver si convenzo a tus padres. ¿Te vienes?
-¿ Me lo preguntas a mí? - Pues claro.
En ese momento empezaron a hacer planes de que a lo mejor encontraban
su preciada isla.
Después de un largo tiempo, Enma logró convencer a los padres
de Tom.
En el día de las vacaciones Alison estaba emocionada. No
sabía que llevarse de los nervios por ir a Ecuador. El día
de fin de curso resultó normal, muy alegre y con muchas diversiones.
Respecto a las notas Alison tuvo en todo sobresaliente y Tom
no suspendió ninguna. El día de la marcha los dos pares de
padres lloraron tanto que casi inundaron el puerto.
El crucero era bastante bueno, los camarotes eran bastante pequeños,
pero estaban bien. En el tercer día de viaje, Alison y Tom
dedicaron gran parte de su tiempo a mirar hacia el mar, les gustaba que
el viento les acariciara la cara con su dulce mano de brisa. Pero entonces:
-¡Alison, mira al fondo¡- una botella con una
nota dentro
- ¿A ver? ¡Es cierto¡
-¿Qué puede contener?
-No lo sé. Pero calla, que nadie se entere. Así podremos
quedarnos nosotros con ella.
-Sí, pero... ¿Cómo la cogemos?
-Humn... pensando he llegado a la conclusión de que la única
manera de cogerla es tirándose al agua con un salvavidas ¡Eso
sí¡, no esperes que sea yo quien se tire a por ella. Me he
comido dos bandejas de pastelillos de crema recubiertos de chocolate
-¡No¡ espera, tengo una idea mejor. ¿Por qué
no cogemos esa cuerda con ese gancho y la traemos hacia nosotros?
Tom la llenó de halagos y Alison sonriendo cogió
la cuerda. La lanzó al agua y atrajo la botella hacia ellos.
-Venga ábrela- dijo con impaciencia Tom-
-Vale, vale.
La carta ponía:
EN BUSCA DEL VERDADERO TESORO
Al Norte: Los Montes del Miedo y el Monte de los Sueños.
En el centro del mapa estaban las dos Colinas Mandarinas.
Al Este, el Bosque de las Mil Maravillas y al Sur los Peñascos de
Furiosa Tempestad.
- En busca del verdadero tesoro. ¿ Qué crees tú
que quiere decir con eso?- Preguntó Tom-
-No tengo ni idea, pero seguro es el mapa de un tesoro.
-Puede ser... Pero, ¿Cómo llegó esta botella aquí?
Además, el pergamino parece tener mucho tiempo.
- A lo mejor lleva flotando en el mar mucho tiempo y nadie hasta ahora
lo ha visto.
- A comer- gritó el cocinero.
-Vamos, dijo Tom- antes de acostarnos veremos este mapa mucho
más detenidamente.
Ya en el camarote, Alison y Tom se sentaron en el sofá
a la luz de una lamparita pequeña.
-¿Dónde se encontrará esta isla? -preguntó
Tom.
-Ni idea. Pero creo que no se ha descubierto todavía.
-¡Genial¡ sólo tenemos que encontrarla y quedarnos
con el tesoro. ¿No lo entiendes Alison? Es nuestro sueño.
Por fin, se va a cumplir.
Alison sacó una bola del mundo y callada comenzó
a girarla.
-Es muy complicado dar con la isla, mañana investigaremos. Será
nuestro último día aquí.
A media noche...
-¡Alison, Alison, despierta, el Barco se está
hundiendo¡
-¿Qué?
-¡El camarote está cerrado y no se puede abrir ¡
-¿Qué?
Alison se levantó cogió el mapa y lo metió
en la botella, se puso una camisa y un pantalón con bolsillos en
los que metió la botella. Corrió hacia la puerta para ayudar
a Tom a abrirla. Empujando, empujando, y... ¡nada¡ no
se abría, entonces...
-¿Queda alguien más en el barco?- preguntó el
capitán a una camarera.
-Absolutamente nadie- contestó ella- deprisa. Vamos a los
botes salvavidas si no queremos hundirnos. Se oyeron pasos que se alejaban
cada vez más.
-¡¡ Aquí¡¡ ¡¡Socorro¡¡
¡¡ Estamos aquí¡¡
Entonces el barco pegó un vuelco y se hundió, la gente
desde los botes pudieron contemplar un espectáculo nada acogedor.
"Un hundimiento".
Continuará...
La Mansión de los Horrores
Por María Escobio González de 2º
C de E.S.O. del IES José Hierro
Introducción
Me llamo Marta, tengo quince años y vivo en Barcelona, en la zona
cercana al "Parque de la Ciudadela".
Todos los veranos me voy de vacaciones a un pueblecito de la sierra que
en otra época, dicen que fue un poblado de brujas.
Todos los chicos de allí, incluida yo, pensamos que es cierto, sobre
todo desde que Javi, un chico guapísimo con ojos verdes de nuestra
pandilla, apareció muerto al entrar en la " Mansión de
los Horrores" (la llamamos así por la cantidad de muertes que
ha habido en ella y por los fenómenos extraños que hay a su
alrededor).
Nadie se atrevía a entrar en ella desde entonces, pero como yo
tengo el defecto de ser demasiado curiosa, decidí entrar allí.
No se lo conté a nadie de la pandilla excepto a Sandra, mi mejor
amiga que me prometió no contarselo a nadie, no porque quisiera ir
sola sino porque me hubiesen impedido ir a toda costa.
Para mi expedición escogí un día de tormenta (sólo
porque coincidió) a las doce de la noche.
CAPÍTULO I
EXPLORANDO A OSCURAS
Tras cruzar el umbral de la puerta eché una ojeada al camino que
había dejado tras de mí y vi una inquietante sombra.
Tenía el miedo metido hasta en el último poro de mi cuerpo,
pero me armé de valor y chillé:
-¡¿Quién anda ahí?¡
Con el chillido espanté a todos los cuervos que se encontraban
en árboles cercanos a mí. Entre los aleteos de los bicharracos
vi que la sombra se acercaba a mí y su voz me decía:
-Soy yo Sandra, por favor no entres ahí es peligroso.
-Lo sé-contesté aliviada. En ese momento el siniestro reloj
de la torre comenzó a dar las doce campanadas dan, dan,...
-Vete de aquí sabes que a las doce las farolas se van apagando poco
a poco y sin luz no podrás volver.
-Está bien-aceptó Sandra-me iré pero como mañana
no te vea en la piscina por la tarde se lo contaré a todo el mundo.
-Al sonar la duodécima campanada y sin dejarme dar respuesta alguna
¡paf¡. La puerta se cerró ante mis narices.
Decidí inspeccionar primero la torre, pero sin darme tiempo a buscar
mi linterna, oí un grito que hizo que un escalofrío recorriese
todo mi cuerpo. Acto seguido miré por una polvorienta ventana al
exterior pensando que podía haber sido Sandra quien había
producido tal estruendo. Pero no había nada, sólo una horrible
oscuridad que me puso los pelos de punta.
-"No puedo echarme atrás-pensé-debo seguir para averiguar
qué le pasó a Javi.". Tras darme ánimos a mí
misma busqué mi linterna y una vez encontrada me alivió la
idea de llevar conmigo luz per....¡Qué horror ¡. Tenía
la linterna pero sin pilas.
Después de acordarme de "todos los santos" sostuve la idea
de volver a casa pero la descarté y sacando el valor de donde no
lo había decidí continuar con mi suicida aventura.
Continuará...
Poemas
Por Luna. Alumna 1º de bachillerato de Ciencias
Sociales del IES Augusto González Linares.
A ELLOS...
"Me escribo, me escribo a mí misma,
me escribo y no sé qué contarme,
me da la impresión que ya sé todo sobre mí misma.
¿Quién me inspira? Ellos me inspiran.
¿Quién me anima? Ellos me animan
¿Quién me oye? Ellos me escuchan."
SUEÑOS
"Anoche soñé contigo.
Estabas a mi lado,
después de mirarte,
te besé, desperté
y me di cuenta de que todo era un sueño"
SIN PRIMAVERA
"Necesito sus besos y sus abrazos en los fríos
despertares invernales. Necesito su aroma en las solitarias
noches veraniegas. Necesito su amor en otoño cuando las
hojas caen y caigo yo en mi habitación solitaria. Necesito su
sonrisa para afrontar los problemas cotidianos. Necesito su
compañía para estar en silencio siempre. Necesito su voz para
oír
campanas celestiales"
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