El C.D. Ramales jugó el pasado sábado 25 de octubre un partido de fútbol en el campo de Cubillas contra los primeros de la liga, La Encina de Santander.

CEO Príncipe de Asturias.

El partido fue a las cuatro de la tarde y hacía muchísimo calor pero, como en todos los partidos, nos juntamos unos cuantos amigos para animar a nuestro equipo, el Ramales. Éramos unos cuantos: Ciro, David, Jessica, Irene, Natalia, María, Henar y yo. Los jugadores saltaron al campo y detrás el árbitro. Poco después de comenzar el partido, el Ramales metió gol y las gradas se volvían locas... A los 15 minutos del gol, Raúl, un jugador del Ramales metió el segundo tanto; era increíble, el Ramales ganaba 2-0 a los primeros de la liga... El árbitro pitó descanso y cada equipo se fue a su vestuario. El entrenador del Ramales sacó a calentar a dos de sus chavales que tenía en el banquillo, Mario y David. Pasaron los 15 minutos del descanso y los jugadores saltaron al campo con el marcador a 2-0 y con 30º de calor, pero también con muchas fuerzas para marcar más goles.

Comenzó la segunda parte y estos solo deseaban que no les marcasen. David se fue de uno y se fue de otro llegando a la portería solo, frente al portero y regateándole consiguió introducir el balón hasta el final de la red. El Ramales ganaba por tres goles a favor.

Después del gol, David le hizo una entrada trasera a un rival, lo que le llevó a la expulsión directa del partido; el Ramales se quedaba con diez jugadores. Tras la expulsión y con el calor que hacía, Mario se desmayó y tuvo que retirarse del campo, así que el Ramales se quedaba con nueve... Aquí empieza lo malo. El Ramales ganando y con dos jugadores menos, todo el mundo se echaba las manos a la cabeza con el miedo de que La Encina marcase gol y se pusiera por encima.

Poco después, otro compañero que fue a rematar de cabeza cayó al suelo y se dio en la nariz, con lo cual empezó a sangrar y tuvo que abandonar el partido. Vamos, que el Ramales se quedaba con ocho jugadores. La Encina aprovechó el momento y metió gol, lo que ponía los marcadores a 3-1. Javier, el compañero que se había dado en la nariz ya estaba listo para entrar, pero el árbitro dijo que hasta que no sacasen el córner no entraba. Y justo en ese momento, en ese córner, La Encima mete el segundo tanto.

Quedaban solo 10 minutos de partido cuando un rival fue a pegar al portero del Ramales, Rubén. En ese momento, Rubén pasó de él y siguió al partido, pero en el momento en que el jugador comenzó a darle patadas, Rubén se calentó y le pegó; el árbitro expulsó a ambos. El Ramales con siete jugadores y ganando solo por un gol. Cuando quedaban cuatro minutos, Alberto se tuvo que poner de portero, ya que habían expulsado al actual.

Rubén se iba tranquilo a su vestuario cuando un padre y un jugador de La Encina salieron tras él a pegarle con una extensible. El partido terminó con victoria del Ramales, y con pelea... Tuvieron que llamar a los guardias para solucionarlo, porque los jugadores de La Encina pegaban y amenazaban a madres y jugadores del Ramales. Aquello fue terrible, lloraba todo el mundo.

Cuando Oscar, un jugador del Ramales, se iba a casa, unos chavales de La Encina que estaban en el aparcamiento le pegaron patadas al coche y le intentaron dar a él por la ventanilla; Oscar no sabía qué hacer y fuimos todos nosotros a solucionarlo, tratamos de razonar con ellos pero al final tuvimos que llamar a los guardias. Oscar se pudo ir tranquilo a su casa y los jugadores se quedaron hablando con los guardias.

Pero bueno, de todo esto nos llevamos lo bueno, nos llevamos la victoria, los tres puntos que ganaron y sobre todo lo bien que jugaron y lo deportivos que fueron.