El director de Parayas, Bienvenido Rico Rodríguez, nació en Badajoz en 1958 y es ingeniero técnico aeronáutico por la Universidad Politécnica de Madrid. Se incorporó en el OAAN (Organismo Autónomo Aeropuertos Nacionales) en 1987 en el Aeropuerto de Menorca como responsable de la sección económica-administrativa. De 1990 a 1998 fue director del Aeropuerto de A Coruña y desde el año 2000 hasta 2009 fue director del Aeropuerto Federico García Lorca Granada-Jaén.

El director de Parayas flanqueado por las reporteras de InterAulas.

Pregunta.- Para romper el hielo, ¿de niño le gustaban los aviones?
Respuesta.- No, de niño me gustaban los camiones, porque vivía en Extremadura en el campo y por allí no pasaban aviones ni había televisión; o sea, que lo que más veía eran camiones, camiones grandes porque mi familia trabajaba en una empresa que estaba construyendo un pantano.

P.- ¿Ha tenido una afición relacionada con el mundo de la aviación?
R.- No, nunca. Estudié Ingeniería Técnica Aeronáutica porque me cogí una guía cuando tenía 17 años estaba en COU y no sabía qué estudiar. Yo vivía en el País Vasco, me cogí una guía y dije: "a ver qué puedo estudiar" y vi una cosa que era Ingeniería Aeronáutica y a mí eso me sonó a algo grande. Mi familia no tenía mucho dinero, así que tuve que coger una carrera que fuese corta y dije: "Bueno, pues voy a coger una de tres años" y Ingeniería Ténica Aeronáutica. Entonces estudié en Madrid, solamente había una universidad donde se podía estudiar, y como era una carrera corta dije: "Pues seguro que aquí hay muy poca gente" y por eso me metí allí, no porque supiese de aviones ni de aeropuertos ni nada; me metí porque el destino me llevó a coger una carrera que el nombre sonaba muy bien, y que era cortita, y que solamente se estudiaba en Madrid y esperaba que no hubiese mucha gente.

Raquel y Lucía posan con Bienvenido Rico.

P.- Ha sido director de otros aeropuertos antes que en Santander. ¿Qué tiene Parayas de especial?
R.- Parayas lo que tiene de especial es el entorno en el que está, porque es un sitio muy bonito; está junto a la bahía, que tiene la característica de tener el aeropuerto, y la ciudad. Quizá es lo que destacaría respecto a los otros en los que he estado, como son el aeropuerto de La Coruña y el aeropuerto de Granada.

P.- ¿A medio plazo es posible mantener la cifra del millón de pasajeros del año pasado que se consiguió en noviembre?
R.- Nuestro objetivo es que esa cifra se consiga. El tema no está en nosotros, porque los aviones no vienen al aeropuerto por el hecho de que el aeropuerto sea más bonito o más grande. Los aviones vienen a Santander y utilizan el aeropuerto de Santander para aterrizar, pero lo que traen los aviones es el entorno; si el entorno es favorable, es bueno y hay mucha industria y mucho turismo pues seguro que habrá gente de fuera que querrá venir. Lo mismo ocurre si la economía va bien, seguro que habrá gente aquí en Santander que querrá salir hacia otros destinos. Pero la idea es que es que esta situación de millón de pasajeros pues la sigamos manteniendo durante tiempo. Recientemente se ha firmado un acuerdo con Ryanair que garantiza cuatro años con los mismos vuelos; eso quiere decir que andaremos durante todo este tiempo muy cercanos, esperemos una cifra de millón de pasajeros.

P.- ¿Y qué tal vamos este año?
R.- Pues este año vamos bien, viendo lo que está cayendo fuera y cómo está la situación. Terminaremos, creo, con las mismas cifras del año pasado con 1.100.000 pasajeros, pasajero arriba pasajero abajo pero vamos a terminar exactamente igual. Los últimos meses han sido muy malos, se va perdiendo mucho tráfico, pero tenemos un buen colchón hasta el mes de septiembre que esperemos que nos pueda salvar el año. Pero, vamos, que llegaremos a 1.115.000 o 1.120.000 pasajeros.

Un momento de la entrevista.

P.- En este momento operan regularmente tres compañías. ¿Ryanair es clave en el aeropuerto de Santander?
R.- No sé si decirte que es clave. Yo te podría decir que el desarrollo del aeropuerto de Santander es Ryanair, es un aeropuerto en el que dependemos exclusivamente de Ryanair. El ochenta por ciento del trafico del aeropuerto es de Ryanair, entonces somos un aeropuerto Ryanair. Eso tiene sus ventajas y sus inconvenientes.

P.- ¿A corto plazo ve a Parayas como un aeropuerto low cost?
R.- Parayas ahora mismo es un aeropuerto low cost. Si el ochenta por ciento o casi el noventa por ciento del tráfico es de Vueling y Ryanair y consideramos que Vueling es una compañía de low cost y Ryanair es también de low cost, Parayas es un aeropuerto de low cost.

P.- ¿Qué es lo que más le gusta de ser el director del aeropuerto y lo que menos?
R.- Me gusta que es un puesto donde tocas todos los campos, tocas los campos de recursos humanos, tocas los campos de ingeniería, tocas los campos de operaciones y después tocas todos los campos de relaciones con el entorno, tanto con las instituciones como con los vecinos. Es decir, te viene mucha gente con un montón de cosas que nunca pensarías que te llegarían aquí, como problemas con árboles, problemas con una finca, cosas de estas raras que hacen que tu vida no sea monótona. Y después lo que menos me gusta, pues no sé, no te puedo decir ahora mismo, no me he parado a pensar qué es lo que menos me gusta. Me gusta mi trabajo.

P.- ¿Cuantas personas trabajan en el aeropuerto? ¿Les conoce a todos?
R.- ¿Les conozco a todos? Pues no, a los controladores no. El aeropuerto es como una ciudad, aquí trabaja mucha gente y de muchos organismos distintos; aquí trabaja el personal de Aena aeropuertos, el personal que trabaja de navegación aérea, que son los controladores y la gente de mantenimiento de la torre, trabaja guarda civil para todo el tema de seguridad, la guardia nacional para el tema del control de pasaportes, trabaja gente de aduanas para la inspección de equipaje, trabajan taxistas, trabajan limpiadoras, trabajan gente en las cafeterías, trabaja personal en las tiendas de alquiler de coches... Es decir, en total puede haber unas 300 personas, gente que viene prácticamente todos los días a trabajar al aeropuerto, lo que es de puestos de trabajos directos de gente que trabaja en el aeropuerto. Después dicen por ahí que puede haber otras mil personas con empleos indirectos que dependen de la actividad del aeropuerto. Por eso muchas veces la pregunta es cuántos somos de Aena, la empresa que gestiona el aeropuerto, si es únicamente la empresa que gestiona el aeropuerto. Somos unos cien trabajadores, contando navegación aérea y aeropuerto.

Entrada al aeropuerto de Parayas.

P.- ¿En qué afecta la crisis al aeropuerto?
R.- Bueno pues la crisis nos afecta en dos aspectos: En primer lugar, nuestros presupuestos se ven reducidos, porque como en todos los sitios se hacen recortes el aeropuerto también tiene que hacer recortes y eso nos afecta sobre todo en los gastos que tenemos destinados al mantenimiento y servicio; tenemos que ir reduciendo los costes. Después afecta también con respecto al entorno, si hay crisis la gente tiene menos dinero, si tiene menos dinero viaja menos, si viajan menos utilizan menos el avión, si utilizan menos el avión tenemos menos pasajeros y si tenemos menos pasajeros nosotros tenemos menos ingresos; o sea, que nos afecta también la crisis en los dos aspectos.

P.- Para finalizar, sabemos que no es usted de aquí. ¿Le gusta vivir en Cantabria?
R.- Bueno, mi mujer es de aquí. Hay un refrán que dice que uno nace donde Dios quiere y se entierra en el pueblo de su mujer. Me gusta mucho vivir en Cantabria. Mi mujer es de un pueblo de la montaña y todos los fin de semana solemos ir al pueblo, un día u otro. Siempre me dice: "Ven, que te voy a llevar al paraíso" y es una zona muy bonita, porque mi mujer es de Cabuérniga, de Los Tojos y entonces el entorno es muy bonito, con los ríos y el bosque... Yo soy un gran defensor de Cantabria. Aquí no, pero fuera de aquí lo defiendo bastante porque es un sitio que reúne todo, sobre todo cuando salen estos días así luminosos, dar un paseo por Puertochico, ver los barcos, ver la bahía, los prados verdes, los montes nevados... Desde luego es un lujo para la vista y para disfrutar de ello. O sea que tú, que eres de aquí, cuídalo, porque tienes una tierra que es muy bonita.

P.- ¿Le gusta volar?
R.- ¿Me gusta volar? Vuelo. Si tengo que viajar prefiero viajar en avión que en otro medio de transporte, o sea que me gusta.