El lunes 14 de mayo José y su compañero, socios de Alcohólicos Anónimos, nos dieron una breve charla en la que nos explicaron en qué consiste y cómo funciona esta organización y sus experiencias.

Página principal de la web de Alcohólicos Anónimos.

Alcohólicos Anónimos es una comunidad donde hombres y mujeres comparten experiencias y esperanzas para resolver sus problemas con el alcohol. Ser miembro es gratuito y se basa en el único requisito de un interés común por dejar la bebida. El objetivo es mantenerse sobrios y ayudar a otros a estarlo.

Tras explicar los datos más importantes de la comunidad, pasaron a contarnos sus experiencias y anécdotas como alcohólicos y antiguos borrachos. La historia de José era similar a la de su compañero. Su enfermedad empezó cuando tenía unos 16 años, que comenzó a consumir bebidas alcohólicas. Al principio lo controlaban, pero con el paso del tiempo se convirtió en su vicio y después en una necesidad. Estando casado y teniendo una hija, se pasaba la mayor parte del día bebiendo, y el resto trabajando, y se perdió al completo la infancia de su hija. Un día cuando, como de costumbre, llegó a casa borracho su mujer, muy enfadada, comenzó a reñirle, más de lo habitual, y su hija estaba con ellos. En ese momento le pidió a su madre que no le riñese, pues solo era una víctima, un enfermo.

Al oír esto, José "abrió los ojos", se dio cuenta de que era realmente un enfermo, una víctima del alcohol, que estaba destrozando su vida. Decidió acudir a Alcohólicos Anónimos por recomendación de su hija. Se esperaba cualquier cosa menos que lo recibiesen con los brazos abiertos y que le tratasen como a un hermano, lo que ocurrió.

José habló con ellos, les contó sus experiencias y ellos le contaron las suyas, y le apoyaron para que dejase de beber. Ese mismo día, tras oír los testimonios de víctimas de su misma enfermedad, y tras ver cómo luchaban por reconstruir sus vidas, decidió que no volvería a beber alcohol.

Tras contarnos sus historia, acabaron la charla aclarando tres datos: que el alcoholismo se considera una enfermedad, que su objetivo con la charla no era que dejásemos de beber o que no lo hiciéramos, solo concienciarnos de los peligros que supone y que bebiésemos con control; y por último, que el objetivo de Alcohólicos Anónimos es que sus miembros se mantengan sobrios y que ayuden a otros, pero no se comprometen a no volver a beber nunca sino que cada día se prometen a sí mismos que no van a probar el alcohol, y repiten esa promesa cada día, manteniéndose sobrios, y curados de la enfermedad.