El pasado
sábado 12 de mayo, inmerso en las fiestas colegiales,
se celebró en el colegio el día PROYDE
de una forma nueva y original, y dirigido a toda la
comunidad educativa: padres, profesores y alumnos.
La jornada comenzó a las 10:30 h., aunque
una hora antes varios profesores y alumnos miembros
de PROYDE estuvieron preparando el montaje de las
actividades que se llevaron a cabo.
La primera actividad, como reclamo para los más
pequeños, fue la de los Payasos Solidarios,
quienes deleitaron a su fiel público en el
escenario del teatro. Mientras tanto, en el polideportivo,
se iba acercando poco a poco más gente y empezaba
a participar en las distintas actividades: talleres
lúdico-formativos sobre África, el reparto
de población y riqueza en el mundo, los criterios
de Comercio Justo... y comenzaban a sonar los primeros
acordes de los tres grupos musicales, formados por
alumnos del centro, que interpretaron sus canciones
hasta el final de la jornada.
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Concierto del
grupo 'Mentes anónimas'. |
Muchos alumnos, y también algunos padres,
se acercaron para participar en dos actividades deportivas
a la vez que solidarias: el Gol y la Canasta Solidarios.
En estas, los participantes presentaban su carnet
en el que figuraban una serie de patrocinadores que
ellos mismos habían buscado. El dinero recaudado
en esta actividad ayudará a financiar el proyecto
educativo que PROYDE desarrolla en Togo (África).
Tras los Payasos Solidarios, los más pequeños
disfrutaron de un taller de maquillaje y, posteriormente,
de un cuentacuentos, nuevamente en el teatro. Para
entonces se había concentrado un grupo mucho
más numeroso en el polideportivo que, además
de bailar y corear las canciones de los grupos, tuvieron
la oportunidad de participar en un taller de capoeira
dirigido por un antiguo alumno del centro.
Además, a lo largo de toda la mañana,
quienes se acercaron al polideportivo pudieron disfrutar
de una exposición sobre el comercio justo y
el consumo responsable, y otra sobre algunas de las
injusticias que los países del Norte cometemos
y cuyas consecuencias sufren los empobrecidos del
mundo.
Una vez más, PROYDE ha demostrado que, a través
de la sensibilización y del compartir generoso,
mucha gente pequeña, haciendo cosas pequeñas,
en muchos lugares pequeños, puede cambiar el
mundo.

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